La deuda del conjunto de las administraciones públicas cerró abril en 1.389.302 millones de euros, 3.431 millones menos que en marzo (-0,2%)y su primer descenso tras cinco meses de récords consecutivos.
Según los datos avanzados este viernes por el Banco de España siguiendo el protocolo de déficit excesivo (PDE), el endeudamiento se incrementó en abril en 153.849 millones con respecto a abril de 2020 debido, por un lado, a las consecuencias de la pandemia y, por otro, a la incorporación de la Sareb al perímetro público.
A cierre de mes, la mayor parte de la deuda se concentraba en el Estado, con 1.202.523 millones de euros (un incremento interanual del 9,4% pero 7.330 millones menos que un mes antes) mientras que las comunidades autónomas aumentaron su deuda en 3.168 millones (+3,1%), hasta los 310.484 millones, y las corporaciones locales, en 587 millones, hasta los 22.702 millones (un 6,3% menos que en abril de 2020).
Por su parte, la deuda de la Seguridad Social se mantuvo sin cambios, en 85.355 millones de euros.
El impacto de la crisis
Desde que comenzase la pandemia en marzo de 2020, la deuda pública se ha disparado en casi 170.000 millones de euros, un salto sin precedentes en las últimas décadas. El desplome de los ingresos por impuestos junto a unas políticas fiscales expansivas para intentar contrarrestar el golpe de la pandemia están generando este fuerte desequilibrio en las cuentas públicas.
La magia de la recuperación puede salir al 'rescate' de la deuda. El BBVA Research prevé que la economía española cierre 2021 con un PIB de 1.206.000 millones, una base que colocaría la deuda de abril alrededor del 115,2% del PIB.
La economista sénior de Funcas, María Jesús Fernández, achaca la bajada de la deuda de abril a "un vencimiento importante" y prevé que siga creciendo en términos nominales a medida que avance el año.
Sin embargo, puntualiza que la ratio de deuda sobre el PIB se irá reduciendo debido al crecimiento previsto de la economía, lo que permitirá cerrar el año en torno al 120% del PIB.
Por instrumentos, la deuda se concentró ese mes principalmente en valores representativos a largo plazo (1.109.103 millones) y, en menor medida, a corto plazo (86.650 millones). El resto se repartió en préstamos (188.633 millones) y efectivo y depósitos (4.917 millones).
La deuda cae después de registrar en marzo su máximo histórico con 1,39 billones de euros, cuando se situó en el 125,3% del PIB. Ese dato del primer trimestre superó el objetivo del Gobierno para todo el año (119,5%) aunque desde el Ejecutivo ya matizaron que en los primeros meses del año siempre se aceleran las emisiones por las mayores amortizaciones en abril y que, posteriormente, la cifra irá convergiendo hacia el objetivo establecido en el Plan de Estabilidad.