El consenso económico elaborado por PwC del primer trimestre de este año ha rebajado medio punto su previsión de crecimiento para el PIB español de 2021. Así, el panel de expertos, empresarios y directivos consultados para el consenso sitúan el incremento del PIB casi en el 5,5% (5,48%), frente a una estimación del 5,95% arrojada hace tres meses.
De esta manera, el pronóstico del consenso de PwC se coloca como el más bajo entre los grandes servicios de estudios nacionales e internacionales, como el FMI, y se aleja ostensiblemente de la estimación del Gobierno –realizada en octubre del año pasado para los Presupuestos Generales del Estado– de una subida de 7,2% sin contabilizar el impacto de los fondos comunitarios y el 9,8% contabilizándolo.
Pandemia y vacunas
Sin embargo, el mal comportamiento del cuarto trimestre que apenas mantuvo el tono positivo –con un escueto crecimiento del 0,4%–, el efecto de la tercera pandemia sobre el primer trimestre del año y la evidencia de que hasta verano no se habrá alcanzado la inmunidad de rebaño con la vacunación han provocado que las previsiones del Gobierno de otoño de 2020 hayan quedado muy desfasadas.
Y según se suceden las previsiones, van a la baja. El consenso de PwC rebaja una décima la estimación de la Comisión Europea de febrero que pronostica un aumento del PIB del 5,6% para este año. Y se coloca a cuatro décimas del panel de Funcas que redujo en marzo cuatro décimas sus previsiones de enero. No obstante, dentro del panel hay dos servicios de estudios, el IEE y Meteyis, que hablan ya de un crecimiento del 4,5% para 2021.
Fuentes de PwC destacan que detrás de esta rebaja de las expectativas de crecimiento de la economía española subyacen las restricciones a la movilidad en todo el país como consecuencia de las sucesivas olas de la pandemia y el ritmo de la campaña de vacunación.

El 83,4% de los panelistas que han participado en el Consenso Económica de la consultora coinciden en calificar como "mala o muy mala" la situación actual de la economía española, aunque el 71,4% espera que mejore en el segundo trimestre del año, y el 87,5% que lo haga dentro de doce meses. Pero cuando se les pregunta sobre el crecimiento medio de la economía para el conjunto de 2021 se observa una rebaja de las estimaciones.
En el anterior Consenso de PwC, correspondiente al cuarto trimestre de 2020 y publicado el pasado diciembre, un 44% esperaba que el PIB español creciera por encima del 6% en 2021. En la actualidad, este porcentaje ha caído más de veinte puntos, hasta el 13,9%.
Pero tan significativo como la caída de los panelistas que ven ya difícil superar el 6% de crecimiento, cabe destacar los que consideran que la economía española no superará un crecimiento del 4%. En concreto, opina así el 17,5% de los consultados por PwC, cuando en las anteriores oleadas del Consenso Económica del cuarto y el tercer trimestre, nadie pensaba que el PIB se quedaría por debajo del 4%.
Los expertos siguen calificando la situación financiera de las familias (51,8%) y de las empresas (58,8%) como mala. Sin embargo, aumentan hasta el 60,5% (+14 puntos) los que esperan que el consumo de las familias aumente en los próximos seis meses y hasta el 55,3% (+8 puntos) los que creen que la demanda de vivienda permanecerá estable.
Por el lado de las empresas, aumentan hasta el 62,2% los que esperan un aumento de las exportaciones, y hasta el 51,4% los que piensan que la inversión productiva de las compañías permanecerá estable en los próximos seis meses. En relación con la creación de empleo, la opinión está dividida entre un 35% que asegura que aumentará, un 30,6% que permanecerá estable y un 34,2% que disminuirá.
Inflación del 1,2%
Los encuestados esperan un ligero repunte de la inflación este año con un incremento de los precios del 1,2%. Aunque dado el contexto económico, no atisban un cambio ni en la evolución de los tipos de interés ni en la política de compra de activos del Banco Central Europeo. Así, el 73,9% espera que siga estable en los próximos seis meses y el 50,5% en los próximos doce.
El Consenso refleja una mejoría en la opinión de los panelistas sobre la situación de la coyuntura internacional, caen los que piensan que es "mala o muy mala" y suben (55,3%) los que la consideran "regular". En positivo, destaca la buena percepción sobre la economía china de la mayoría de los encuestados (58,6%) y en negativo, la opinión menos favorable sobre situación de la actividad en la Unión Europea, cuya recuperación se mantiene un poco a la zaga respecto a otros países, como EEUU y Japón. No obstante, un abrumador 83,6% los panelistas considera que la UE se habrá recuperado de esta situación a finales del presente año.
Los jóvenes, los peor parados
La reducción de la población joven, una formación inadecuada y el excesivo peso de la contratación temporal son los principales problemas del empleo juvenil en España, según los panelistas del Consenso Económico del primer trimestre de 2021 elaborado por PwC que dedica un apartado monográfico sobre los jóvenes, la formación y el empleo en España.
Los expertos, empresarios y directivos consultados por la consultora para el Consenso Económico creen que los jóvenes serán los grandes perjudicados por la crisis económica provocada por la Covid-19 y reclaman cambios en la formación y reformas para acabar con la excesiva temporalidad del empleo juvenil.

A la pregunta de si considera que los jóvenes son los grandes perdedores de ambas crisis (en referencia a esta provocada por la pandemia y la anterior de 2008-2013) el 55,1% contesta que "en gran medida", en 4,7% que "en absoluto" y el 40,2% restante que "se han visto afectados en la misma medida que otros colectivos", como por ejemplo lo mayores de 55 años, las mujeres o las personas peor cualificadas.
La tasa de paro de los jóvenes en España volvió a repuntar en 2020 y se situó en el 38%, muy superior a la de la mayoría de los países europeos. Los encuestados afirman que la reducción de la población joven, una incorrecta formación –inadecuada para las necesidades productivas– y la excesiva proliferación de la contratación temporal son los principales ejes sobre los que se debería actuar para mejorar la situación de los jóvenes en el mercado laboral. Los panelistas, sin embargo, no ven un problema importante en la baja movilidad regional de los jóvenes en España.
Respecto a la temporalidad, que llega al 48% en los jóvenes (el 24% de media), opinan que lo sitúa en primera línea de los ajustes laborales en tiempos de crisis. El 67% de lo encuestados considera que debe reducirse el porcentaje de temporalidad. Para ello, el 66,1% apuesta por reducir la brecha entre los costes del despido para los contratos temporales y fijos, y el 41% cree que se debería penalizar la concatenación de contratos temporales.