La relación con Hacienda puede ser una tortura para los autónomos si el proceso no se realiza de manera detallada y correcta. Ante el gran número de detalles a tener en cuenta, cualquier despiste o confusión puede costar dinero, por lo que es muy importante evitar errores a la hora de hacer el borrador de la Renta o la liquidación de los impuestos trimestrales.
Los expertos de la gestoría Declarando explican cuáles son los cinco errores más frecuentes a la hora de afrontar las obligaciones con Hacienda por parte de estos profesionales.
1. No deducirse todos los gastos
Esto es importante, ya que está en juego ahorrar ciertas cantidades de dinero. En Declarando aseguran que existen más de 100 gastos deducibles y no deducirse los que se puede o hacerlo de manera incorrecta puede mermar al autónomo de cara a la partida en la que más puede ahorrar cuando elabora sus cuentas. Generan muchas dudas los relacionados con dietas, gastos de viaje o de suministros cuando se teletrabaja.
Es clave conocerlo bien, ya que incluso en el caso de delegar estos trámites a una gestoría la iniciativa debe partir del autónomo, que de la misma forma también ha de evitar deducirse gastos que no lo son.
2. Olvidarse de todo cuando se contrata a una gestoría
Contratar los servicios de un gestor no significa que haya barra libre para la dejadez: las gestorías suele nencargarse de manejar los datos que el cliente les proporciona y, dado que hay muchos clientes, es muy complicado hacer un estudio personalizado de cada situación.
Por todo esto, hay que estar encima, informar de todos los gastos, cambios en la actividad...y repasar todos los aspectos que aparece registrados en la entrega de modelos trimestrales y anuales.
3. No planificar el pago de los impuestos trimestrales
Organizar con tiempo estos pagos para así saber el resultado ante Hacienda no suele ser una práctica habitual, pero en realidad es muy útil para hacer previsiones de pagos a lo largo del trimestre o tomar otra serie de medidas: adelantar o no un pago, la presentación de un proyecto a un cliente, solicitar aplazamientos del IVA, préstamos...
4. No entregar los modelos en el plazo indicado
De acuerdo con Declarando, un autónomo tiene hasta once modelos diferentes, y si se retrasa demasiado en la entrega de alguno de ellos se expone a sanciones que dependerán del tiempo de retraso, su voluntariedad...
Hay que tener sumo cuidado, ya que pequeños cambios en la actividad del autónomo pueden suponer diferentes obligaciones (entrega de nuevos modelos) con Hacienda, y si no se presta atención, se pueden dejar desatendidas con lo que ello conlleva.
5. No sacar todo el partido a la Declaración de la Renta
Monitorizar la situación fiscal con previsión puede hacer que, al igual que con la presentación de los impuestos trimestrales, el autónomo pueda adaptar su calendario de pagos y entrega de proyectos con el fin de sacar más partido a su borrador.
Saber cuánto le queda para aumentar de tramo en el IRPF, si cuenta con margen para hacer más compras o actividades deducibles...todo ello se consigue con antelación, y suele tratarse de un error en un momento clave como es el de la presentación de los impuestos anuales.