Los datos económicos desmienten al Gobierno, que asegura que la recuperación económica por la crisis del coronavirus está cerca. La pérdida del turismo, el colapso del PIB, el desplome del empleo y una deuda pública disparada han tumbado los indicadores de confianza económica europeos, que en el resto de países muestran ya una mejoría.
Sin embargo, la vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, aseguró esta semana que la recuperación será en"V asimétrica". Además, el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, afirmó por su parte que el impacto de esta crisis "es temporal" y que "no debería haber daños graves para la economía" española tras estos meses de crisis.

Los analistas de Bruselas reflejan lo contrario. Según el indicador de sentimiento económico (ESI), elaborado por la Comisión Europea, España se descuelga de la recuperación de la confianza económica del resto de Europa. Los datos, publicados este viernes, revelan que el país es el único de las grandes economías donde la confianza ha empeorado en este último informe.
Por su parte, la confianza económica de la zona euro y la Unión Europea ha mejorado sustancialmente en agosto, lo que ha permitido recuperar ya en ambas regiones hasta el 60% del terreno perdido durante la "gran reclusión" de marzo y abril.
El mayor pesimismo en los indicadores europeos de confianza se lo lleva España este mes, mientras el entorno se recupera
En el caso de España, el ESI se ha situado en agosto en 88,1 puntos, frente a los 90,6 del mes anterior, poniendo así fin a tres subidas mensuales consecutivas tras el desplome observado entre marzo y abril, cuando el dato de confianza económica llegó a caer hasta los 73,3 puntos. En la Zona Euro, el indicador ha mejorado a 87,7 puntos desde los 82,4 de julio, mientras que en la Unión Europea ha subido a 86,9 desde los 81,9 enteros.
Este mayor pesimismo respecto de la evolución económica de España en agosto ha sido generalizado entre los distintos sectores, salvo la industria, cuyo indicador ha mejorado ligeramente hasta los -11,8 puntos. Sin embargo, el dato de confianza del sector servicios ha caído hasta los -38,3 puntos, mientras que entre los consumidores la confianza ha bajado a -28,7 puntos y en el comercio minorista hasta -27,8. Por su parte, en la construcción ha caído a -26,4 enteros.
Desplome del empleo
Entre los peores indicadores para la economía española está el empleo. De hecho, España encabeza el mayor repunte del desempleo en la zona euro de los últimos dos años, con una tasa de paro que alcanza el 15,6% de la población activa. El país supera a Grecia, que históricamente es la única región de entorno comunitario con más desempleo que nuestro país, pero que en la lectura tras la pandemia abandona esa posición que ahora ocupa nuestro país como el que más paro tiene de Europa. En consecuencia, la tasa de paro de la zona euro se situó el pasado mes de junio en el 7,8%, una décima por encima del nivel del mes anterior y su peor lectura desde febrero de 2019, mientras que en el conjunto de la UE subió también una décima, hasta el 7,1%, en máximos desde octubre de 2018, según Eurostat.
El desplome del empleo es una clara consecuencia del colapso productivo. La lectura del PIB que arrojan los datos del INE en el segundo trimestre del año del 18,5% está en línea con los escenarios más adversos expuestos por los principales organismos de análisis macroeconómico para la economía española en el conjunto del año como la OCDE (-14,5%) y el Banco de España (-15,1%). Es decir, la caída histórica del segundo trimestre llevaría al PIB a registros de este nivel ya que son los escenarios que preveían nuevos rebrotes de coronavirus y la vuelta a ciertas restricciones para la actividad económica, tal y como ya está ocurriendo en numerosas comunidades autónomas con las limitaciones impuestas, por ejemplo al ocio nocturno. Pero, más allá, según advierten los expertos las cifras que arrojan los datos agregados de este trimestre marcado por el confinamiento podrían ahondar en la recesión por encima del 15%.
La deuda pública ha alcanzado su máximo histórico durante estos meses
Tras estos datos, la deuda pública del Estado ha alcanzado su máximo histórico. La deuda del conjunto de las administraciones públicas registró en junio un incremento del 2,5% respecto al mes anterior, al sumar 32.087 millones de euros más como consecuencia de la crisis del Covid-19, hasta un nuevo máximo histórico de 1.289.905 millones de euros. La deuda pública se mantiene por encima del 100% del PIB, un valor que ya superó en mayo.
En concreto, en referencia al PIB a cierre de 2019, la deuda pública de España se sitúa sobre el 103,53% del PIB, pero supera el 109% si se computa el desplome del segundo trimestre. Hay que remontarse a 1908 para alcanzar un nivel parecido de endeudamiento respecto al PIB.
El mayor golpe
La OCDE calcula que la economía española sufrirá la mayor contracción entre los países desarrollados si se produce un rebrote del coronavirus después del verano. Según el organismo, el desplome de la actividad llegará hasta el 14,4%.
Las previsiones se encuentran entre las más pesimistas de los organismos internacionales y nacionales. Además, la OCDE cree el PIB global caerá entre un 6% y un 7,6% y que la recuperación global será lenta. Alerta de que la renta per cápita de los países desarrollados caerá a niveles de 2013.