Economía

Caldera: superávit de la S.Social en 2006 duplicará lo previsto

Madrid, 20 nov (EFECOM).- El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, anunció hoy que la Seguridad Social acabará 2006 con un superávit de 11.900 millones de euros (el 1,2 por ciento del PIB), una cifra récord que casi duplica los 6.500 millones previstos inicialmente por el Gobierno.

Durante su comparecencia en la Comisión de seguimiento del Pacto de Toledo del Congreso de los Diputados, Caldera sostuvo que la "excelente" situación de la Seguridad Social permitirá que el Fondo de Reserva, la llamada "hucha de las pensiones", alcance los 45.000 millones en 2007, 3.000 millones más de lo estimado en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para el próximo año.

Si se incluyen las reservas de las mutuas y el fondo de previsión de riesgos laborales, las reservas de la Seguridad Social ascenderán a 50.000 millones.

Según Caldera, el sistema de la Seguridad Social "goza de buena salud y no tendrá problemas serios en el futuro", dadas las "favorables perspectivas económicas y de empleo".

De hecho, espera que mantenga el superávit hasta al menos 2020, cinco años más que las últimas estimaciones de la Seguridad Social, que se realizan con criterios "moderados y prudentes".

El ministro, que aseguró que esta evolución sitúa a España en la mejor situación de Europa, insistió en que la situación actual del sistema permite que "las pensiones no sólo no estén en riesgo, sino que podrán irse mejorando en el futuro".

Así, estima que los 921 euros que se cobran actualmente como pensión media del Régimen General se elevarán a 1.300 euros en 2015 y a 1.500 euros en 2018.

Ante estos datos, Caldera consideró "suficiente" la intensidad de las reformas de la Seguridad Social, que son "necesarias", si bien "lo imprescindible para la buena marcha de nuestro sistema es un entorno de crecimiento y riqueza".

Caldera, cuyo discurso fue calificado de "autocomplaciente, triunfalista y demagógico" por el diputado del PP José Ignacio Echániz, intervino hoy en el Congreso para explicar la reforma de la Seguridad Social, firmada el pasado 13 de julio con los agentes sociales y que espera que "se convierta en ley a finales de este año o a principios, muy principios de 2007".

En su opinión, el acuerdo "no es una reforma para la crisis", sino que "da unas perspectivas de estabilidad grandes a lo largo del tiempo".

La reforma de la Seguridad Social eleva el período de cotización para tener derecho a una pensión contributiva a 15 años efectivos, aumenta un año, hasta los 61 años, la edad para acceder a la jubilación parcial tras un período transitorio y extiende la pensión de viudedad a las parejas de hecho que acrediten un período de convivencia mínimo que fijará el Parlamento.

En referencia a la jubilación parcial, Caldera consideró que es una "figura necesaria si se utiliza adecuadamente" y defendió que los nuevos requisitos para acceder a ella persiguen evitar el gasto fraudulento y no recortar derechos.

En cuanto a la pensión de viudedad, señaló que "es posible que el incremento pueda ser un poco superior" al previsto para toda la legislatura.

La reforma también contempla una compensación a tanto alzado de las pensiones de los más de 500.000 trabajadores despedidos mediante un expediente de regulación de empleo (ERE) antes de 2002, que representan el 62,4 por ciento de todas las prejubilaciones anteriores a esa fecha.

Al respecto, Caldera aseguró que los que tienen 60 ó 61 años verán aumentada su pensión en 54 euros mensuales; los de 62 ó 63 años, en 36 euros, y los de 64 años, en 18 euros.

El ministro también mantuvo que la reforma de la Seguridad Social permitirá el afloramiento de casi 600.000 empleos sumergidos, pese a las críticas del diputado Echániz, quien calificó de "chapuza monumental" esa medida.

Al hilo de la reforma, el titular de Trabajo y Asuntos Sociales criticó a quienes hace años auguraban la pronta quiebra del sistema, ya que "se han equivocado de modo rotundo y absoluto".

De acuerdo con sus datos, el pago de las pensiones supone en la actualidad 74.000 millones de euros, una cifra que representa el 7,6 por ciento del PIB y que es "perfectamente sostenible y mantenible".

Ese gasto oscilará entre el 12 y el 13 por ciento del PIB entre 2030 y 2040, "lo cual es perfectamente asumible porque se trata de cantidades similares al esfuerzo previsto de otros países europeos". EFECOM

ecm/prb

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