Las alarmas han saltado en el sector del automóvil después de que se filtrase un borrador con la reforma del Impuesto de Matriculación (Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica IVTM) que implica un fuerte aumento de los tipos que se aplican actualmente sobre la compra de un turismo. | Jaguar Land Rover pide al Gobierno consenso para abordar cualquier reforma de la tributación del automóvil
La Asociación de Fabricantes de Automóviles (Anfac) ha realizado un análisis del impacto que tendría la reforma tal y como ha saltado a los medios de comunicación: las compras descenderían entre un 10% y un 13% y el precio de los coches actuales aumentaría de media 1.100 euros, lo que supone un 6% más.
Anfac no ha hecho un análisis exhaustivo de cuánto puede suponer el aumento de la recaudación por el Impuesto de Matriculación, pues los datos de emisiones medias del año pasado (121 g/CO2) -que marcan los tipos que se aplican en este tributo- sufrirán cambios profundos. La entrada en vigor de la normativa CAFE de Bruselas que exige la reducción de la media de las ventas de cada marca a 95 g/CO2 rebajará de forma considerable las medias de emisiones. No obstante, fuentes de la patronal cifran entre 300 y 400 millones la recaudación extra, a sumar a los 611 millones de euros recaudados en 2019. Una cifra que parece conservadora a otras fuentes del sector que calculan que podrían duplicar los ingresos actuales, unos 600 millones más.
En cualquier caso, lo que sí ha calculado Anfac es que la caída de las ventas conlleva un descenso en la recaudación por IVA -el 21% del precio del coche- que la patronal estima en un mínimo de 425 millones y un máximo de 540 millones de euros.
Todos, menos los eléctricos
Si finalmente se aprueba el nuevo Impuesto de Matriculación tal y como está en el borrador elaborado por el Ministerio de Transición Ecológica, prácticamente la totalidad de los turismos que se compran en España estarán obligados a abonar el impuesto, lo que supone un cambio radical de la actual configuración que deja exentos del pago a todos los modelos cuyas emisiones son inferiores a 120 g/CO2 por kilómetro. En 2019, el 59% de los turismos que se compraron en España no tuvieron que pagar este tributo al emitir por debajo de esa cifra.
Según el borrador, sólo los modelos eléctricos puros estarán exentos, tan solo el 0,9% de las matriculaciones actuales. Por tanto, el 99% de los coches que se compran en la actualidad tendrán que abonar el IVTM, incluidos los híbridos. Según la información publicada por varios medios, Transición Ecológica pretende aumentar la tabla de tipos haciéndola mucho más progresiva.
Se pasaría de los cuatro tipos actuales a diez. El actual primer tramo, exento, se aplica a los coches que emiten entre 0 y 120 gramos y que en el borrador se divide en cuatro: un primero, el único exento, se aplicará a los modelos de cero emisiones (eléctricos), un segundo entre 1-49 gramos (híbridos) que tributaría al 2,75%, el tercero de 50 a 80 gramos (híbridos y gas) que pagaría al 4,75% y el cuarto, de 81 a 120 gramos, gasolinas y diésel, al 7%. En 2019 concentró 768.660 coches (con una base imponible de 12.425 millones de euros), que en su mayoría se colocó por encima de los 80 gramos, pues todos ellos arrojaron una media de 106 g/CO2.
El segundo tramo, de 120 a 160 g/CO2, al 4,75%, se dividirá en dos y doblará el tipo: los de 121 y 140 g/CO2 pagarán un 9% y los de 141 a 160 g un 11%. El año pasado, en este tramo se matricularon 452.800 unidades con una base imponible de 8.459 millones.
El tercer tramo, de 161 g a 200, al 9,75%, se parte en tres tramos: de 161 a 170, que sube a un 12%; de 171 a 190 g al 13% y de 190 a 199 g, al 14%. En 2019 se situaron en este epígrafe 56.930 coches con una base conjunta de 1.440 millones de euros. Y el cuarto tramo, por encima de los 200 g, se queda igual, aunque sube un cuarto de punto de tributación, del 14,75% al 15%. En 2019, fueron 21.525 por 540 millones.
Plan Automoción 2020-40
El automóvil siempre ha pedido la supresión de Matriculaciones. La patronal Anfac reiteró el martes a Pedro Sánchez, en la primera reunión que mantiene con los fabricantes, y a la propia Teresa Ribera, presente en la reunión, la creación de un "marco fiscal integral al uso del vehículo con enfoque medioambiental", con un impuesto a la utilización en función de las emisiones de CO2 y vinculado a la supresión del Impuesto de Matriculación.
También aboga por la creación de un IVA reducido para los vehículos eléctricos, además de ayudas a la renovación del parque con vehículos de cero y de bajas emisiones o por ayudas por inversiones en instalación de puntos de recarga. Otras acciones solicitadas por Anfac son la homogeneización de la regulación en todo el territorio nacional, la defensa de la neutralidad tecnológica, el impulso a la flexibilidad laboral o la potenciación de los polos industriales, entre otras iniciativas a llevar a cabo.
