"Llevamos meses de bloqueo y con ganas de trabajar y abordar los retos que tiene este país", decía la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, este lunes durante su toma de posesión, en una suerte de reconocimiento velado de la demora en la agenda reformista que han supuesto los largos meses de ingobernabilidad vividos en nuestro país.
A los pocos minutos, la vicepresidenta y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, aplaudía durante su toma de posesión la circunstancia de que durante su periplo al frente de la cartera de Economía y Empresa, en la breve legislatura anterior, se pudieron aprobar muchos proyectos normativos "pese a la fragmentación parlamentaria".
Ambas en positivo reconocieron el impacto de los meses de negociación política infructuosa y saludaron la nueva etapa de Gobierno en coalición que permitirá, a su juicio, abordar las decisiones que necesita nuestra economía para "seguir capeando mejor que otros la desaceleración económica internacional", en palabras de Calviño. Maroto saludó el arranque de este Gobierno, de este "proyecto compartido" que arranca con el primer Gobierno en coalición de nuestra democracia.
Por su parte, Calviño alabó el proyecto de un Gobierno "progresista, feminista y europeo" en el que se embarcó hace año y medio, recién llegada de sus cargos en Bruselas, y alabó la resistencia de la economía española, que pese a los embates del contexto económico exterior, resiste mejor que nuestros socios y vecinos y otras grandes economías.
Además, Calviño tomó posesión remarcando que la buena gestión realizada durante el mandato anterior "se ve reconocida en la elevación del Ministerio a Vicepresidencia". Y en un sutil marcaje a pretensiones más escoradas, como las que propugna el socio de Gobierno Unidas Podemos, calificó además la política del Gobierno socialista de "responsable, coherente y moderada". Justo ese factor, la moderación, volvió a aparecer en sus discurso a los pocos minutos, al definir la hoja de ruta del Gobierno como "clara, moderada y progresista".
"Tranquilidad" de Calviño
Manifestó Calviño durante su discurso un tono de serenidad. "Estoy tranquila", apuntó, con "una hoja de ruta clara, moderada y progresista" y felicitó al Consejo de Ministros y al equipo de Ministerio, para pasar a citar uno de los conceptos más transversales y repetidos durante las tomas de posesión que se han sucedido a lo largo de la jornada de este lunes: el carácter "inclusivo" de las políticas económicas que propugna el nuevo Gobierno del presidente Pedro Sánchez.
Manifestó la vicepresidenta su intención de seguir enfrentando los retos heredados del pasado, los actuales, y los que están por venir, en especial en materias como el cambio climático y el reto demográfico. Destacó la importancia de tomar acciones sostenibles y por una transformación digital al servicio de las personas. La vicepresidenta declinó hacer declaraciones fuera del acto oficial de toma de posesión en la sede del Ministerio.
En este sentido, el ministro de Ciencia, Pedro Duque, remarcaba en el mismo acto, durante su toma de posesión, la necesidad de que, ante un futuro lleno de retos, "nuestro país retenga y atraiga el mejor talento". En un multitudinario acto que rebasó con creces el aforo del salón de actos del Ministerio, Duque llamó a una modernización del modelo productivo: No se puede asegurar la sostenibilidad de las futuras pensiones si seguimos vendiendo las mismas cosas, zanjó, llamando así a la innovación basada en el conocimiento y al impulso de la "democracia científica", a la mayor eficiencia del sistema económico, la mayor equidad e igualda entre capas sociales y al afianzamiento del potencial exportador de nuestro país, que "ha cambiado mucho en los últimos diez años" y necesita caminar a un creicimiento más inclusivo y sostenible.