
La Policía cree que el Valladolid-Valencia de la jornada 38 de LaLiga Santander que acabó con un 0-2 que clasificó a los chés para la Champions League 19/20 fue amañado. Así lo desvela El Mundo, que cita los informes de la investigación que está realizando el Juzgado de Instrucción número 5 de Huesca en el contexto de la 'Operación Oikos' que investiga el arreglo de partidos por una trama liderada supuestamente por los exfutbolistas Raúl Bravo y Carlos Aranda para sacar beneficios económicos mediante apuestas deportivas.
Estos informes aseveran que en el duelo entre vallisoletanos y valencianistas "se condicionó claramente el resultado del mismo, atentando directamente contra la integridad de la competición". Las acusaciones descargan de responsabilidad a ambos equipos, pero sí se dirigen contra "varios jugadores del Valladolid" y, al menos, contra Borja Fernández.
El capitán del Valladolid, ya retirado, fue detenido el día de la ronda de detenciones de la 'Operación Oikos' considerado como posible cooperador de la trama. Los informes de la Policía recogieron una reunión del futbolista con Raúl Bravo en un bar de Valladolid días antes del partido. Por su parte, se intervino a Carlos Aranda una conversación en la que aseguraba que había captado hasta a siete jugadores pucelanos para amañar el partido.
Este amaño estaba destinado a un doble propósito: lograr una victoria del Valencia en la primera parte del partido y al final. El desenlace fue el previsto por la trama.
La RFEF ha abierto expediente al Valladolid, a Borja Fernández y a Keko por una denuncia del Girona
En una jornada de miércoles intensa, la Federación Española de Fútbol (RFEF) decidió abrir un expediente a Borja Fernández, Keko Gontán y al Valladolid por una denuncia del Girona a raíz del Valladolid-Valencia, en una petición que también incluiría una propuesta del club catalán de una Liga de 21 equipos si no hay un dictamen antes del inicio de la competición. Un escenario, por otra parte, no contemplado por la patronal.
La federación también decidió la suspensión provisional de Íñigo López, otro de los detenidos de la 'Operación Oikos', tras sus declaraciones a El Mundo asegurando que el Huesca se dejó llevar por un pacto de caballeros ante el Nástic para favorecer al equipo de Tarragona, que se jugaba la permanencia en Segunda al final de la temporada 17/18. Ese partido originó la investigación de la Policía.
Horas antes, LaLiga había informado de la apertura de un procedimiento de información reservada para determinar si el Huesca-Nàstic "sin prejuzgar ni predeterminar en este momento las concretas infracciones de posible comisión".