
Con la regulación europea, las plataformas de criptomonedas empiezan a entrar en nuevos mercados. La licencia MiCA, la necesaria para ofrecer activos digitales en Europa, permite a las empresas de la industria operar en todo el bloque, algo que hasta hace muy poco no era posible. Por eso, OKX, que tiene sede en Malta y ya ha obtenido la autorización pertinente, aterriza oficialmente en España. Con motivo de su llegada a nuestro país, el consejero delegado de la firma, Erald Ghoos, defiende la idea de que las criptos "no son el salvaje Oeste".
"La idea de que la industria cripto es el salvaje Oeste es cansina y, sinceramente, ha quedado desfasada. Aunque esto ha podido aplicar en algunos puntos de la industria en sus orígenes, ahora, y especialmente en los mercados regulados, como Europa, la realidad es muy diferente. Por eso, hemos lanzado nuestro corto 'el moderado Oeste' ('Mild Mild West' -como una de las obras del grafitero Banksy-) en nuestro evento de inauguración en España. Transmite la idea de que la libertad no es la ausencia de normas, es el resultado de tener la estructura correcta y las herramientas adecuadas. Apoyamos la regulación porque es la base y es lo que sostiene la innovación", dice el directivo.
Aún así, la regulación es algo muy reciente y todavía tiene que llegar a muchos rincones del mundo. Solo el 20% de los principales mercados tienen regulaciones integrales y solo ocho de 25 jurisdicciones han implementado marcos normativos completos que aborden la responsabilidad financiera, la protección al consumidor y la seguridad del mercado, según un informe de Chainalysis. OKX pagó una multa de 500 millones en Estados Unidos por operar sin licencia.
Ahora, es una de las firmas cripto más grandes del mundo y el equipo que se encarga de España, que lidera Ignasi Giralt, está en crecimiento. Aunque entran a cada mercado contratando a profesionales locales y especializados en cada geografía, no tienen oficinas aquí. De momento, se centran en ofrecer la aplicación en español y en el cumplimiento normativo, explica la compañía. Aunque el Espacio Económico Europeo (EEE) les permite llegar a una treintena de países, tienen cinco como prioridad: España, Alemania, Francia, Holanda y Polonia.
La compañía quiere llegar al cliente minorista y al institucional, por dos vías. Por un lado, con la captación de clientes propios y mediante acuerdos con los bancos y las fintech. Es habitual que la plataformas de criptomonedas ofrezcan servicios para operar con criptos a las entidades financieras, que después los ofrecen a sus clientes bajo su propia marca. Es lo que hace Bit2Me con la filial turca de BBVA, Garanti.
"Estamos explorando activamente alianzas estratégicas, lo que incluye bancos y fintechs para ampliar el acceso a las criptomonedas y dar confianza. Es esencial si queremos que la adopción sea generalizada y no solo un nicho", afirma Ghoos. En España, van a ofrecer 270 criptomonedas, operaciones spot, staking y bots de trading automatizado. Además, la firma está trabajando para poder ofrecer más productos y servicios específicamente en el mercado nacional, explican.
OKX está entre las cinco mayores plataformas de intercambio de criptomonedas por volumen de operaciones. En las últimas 24 horas, ha movido más de 2.000 millones de dólares en transacciones, según CoinMarketCap. La empresa tiene 60 millones de clientes a nivel global y varias oficinas por todo el mundo. La firma cripto está creciendo, tanto en usuarios, como en activos bajo gestión y en trabajadores en Europa, señala la empresa.
OKX, que fue fundada en 2013 y entonces se llamaba Okcoin, tiene su sede europea en Malta. La normativa europea para criptoactivos (Markets in Crypto Assets, MiCA) ha entrado en vigor este 2025 y la empresa ha obtenido la licencia para operar en Europa, lo que le permite abrir negocio en cualquier país del bloque. Antes de la llegada de la normativa, las plataformas solo podían captar clientes y publicitarse en el lugar donde tuvieran su sede. Sí podían registrar a los clientes de otros países que se dieran de alta voluntariamente, pero no ir a por ellos expresa y directamente.
En febrero, la compañía obtuvo el visto bueno del regulador, el homólogo de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en Malta, la MFSA. La licencia se confiere a nivel nacional e incluye lo que se conoce como pasaporte MiCA, que permite a las empresas autorizadas en un estado miembro operar en toda Europa sin necesidad de licencias adicionales. En España, es la CNMV la autoridad competente. Este año, hay un periodo transitorio que permite operar a las empresas que ya estaban registradas en los distintos países mientras esperan la licencia definitiva. Por eso, a medida que se vayan concediendo las autorizaciones, los mercados nacionales irán creciendo con empresas que antes estaban limitadas a sus propias fronteras.