
La escasez de producto está frenando la inversión en el sector de oficinas, que en los nueve primeros meses del año ha caído un 25% respecto al mismo periodo del año anterior, ejercicio en el que se alcanzaron cifras récord. Según datos de la consultora inmobiliaria Aguirre Newman, las operaciones cerradas en este periodo han situado la inversión en 2.200 millones de euros.
Aunque el interés por parte de los inversores sigue siendo muy elevado en las dos grandes ciudades españolas, lo cierto es que Madrid sigue ganando terreno a Barcelona. Así, la capital acapara el 72% del volumen total desembolsado hasta septiembre, con 112 operaciones, por volumen de 1.600 millones de euros.
Con estas cifras, Madrid supera con creces el ratio del 67% que alcanzó en 2014 y se acerca al 80% que logró durante todo 2015, cuando Barcelona representó el 20%. Estos porcentajes se alejan de los que solían alcanzar ambas ciudades en años anteriores, siendo el 65% para la ciudad madrileña y el 35% para Barcelona, unos ratios que responden principalmente al tamaño de ambos mercados, ya que el de la Ciudad Condal es aproximadamente la mitad que el de Madrid.
La falta de producto, sumada al apetito inversor y al exceso de liquidez que hay en el mercado, ha mantenido en marcha el ajuste de las yields, que "para los mejores activos se sitúan por debajo del 4% en Madrid y del 4,5% en Barcelona", según explica la consultora.
Madrid mantiene también el liderazgo en las rentas, con una máxima en este periodo de 33 euros por metro cuadrado al mes, frente a los 21,5 euros por metro cuadrado al mes que se han alcanzado en Barcelona.
Contratación bruta
En cuanto a contratación bruta, la capital ha registrado un ajuste del 32%, con 92.166 metros cuadrados en el tercer trimestre. Si bien, Aguirre Newman aclara que se "mantiene el comportamiento positivo de la demanda, ya que la contratación total durante 2016 es tan sólo un 8% inferior a la del mismo periodo de 2015, a pesar de que la nueva oferta incorporada sigue siendo muy baja". Esta situación cambiará en los próximos trimestres, ya que las grandes patrimonialistas están llevando a cabo importantes rehabilitaciones en el distrito financiero de la capital, tras las cuales saldrán al mercado alrededor de 100.000 metros cuadrados nuevos de alta calidad, dando aire a un mercado algo obsoleto tras la crisis.
En Barcelona, durante el tercer trimestre, se han contratado 85.127 metros cuadrados de oficinas, un descenso del 43% respecto al mismo periodo de 2015. No obstante, la firma recuerda que los datos del año pasado incluían una operación inusualmente grande, "por lo que en 2016 se mantiene el buen comportamiento de la contratación".