
Arranca la puja por el 40,32% del gigante de las infraestructuras Globalvia. La venta de la participación de OPTrust, fondo de pensiones de Canadá que entró en la compañía española en el año 2015, se inicia en los próximos días y ha despertado el apetito de otros grandes inversores con vocación de permanencia que preparan ya sus ofertas. El fondo soberano Mubadala, de Abu Dabi, la aseguradora Swiss Life y el fondo de pensiones canadiense CDPQ (Caisse de dépôt et placement du Québec) se han mostrado interesados en participar en el proceso de desinversión, de acuerdo a distintas fuentes consultadas por elEconomista.es, que inciden en que la lista puede ser más extensa en esta etapa prematura. Algunas voces apuntan también al interés del fondo estadounidense GIP y de Blackstone.
El calendario, que ha sufrido un parón en los últimos meses, marca que a mediados de octubre se deben recibir las ofertas indicativas (NBOs en el argot del sector). En diciembre será el momento de remitir las propuestas vinculantes por la compañía. El porcentaje que sale al mercado está valorado en aproximadamente 1.200 millones de euros - incluyendo deuda -, con una valoración de empresa de 3.000 millones.
El diseño de la operación arranca por la venta de la minoría que está en manos de OP Trust, pero con aspectos en la gobernanza de la compañía que pueden ser claves. Los derechos de arrastre ('tag along') y compra preferente ('Rofo', por sus siglas en inglés) que poseen los otros dos grandes propietarios de Globalvia, los fondos de pensiones PGGM y Universities Superannuation Scheme (USS), tenedores del 40,80% y 18,88% del capital, respectivamente, pueden alterar el resultado final hasta encarecer el precio de la operación o bloquear el intento de compra de los interesados.
En este sentido, en el mercado se apunta a la posibilidad de que PGGM pueda ejercer su derecho preferente de compra o de que USS pida también que su participación sea adquirida. Ambos condicionantes se perciben como desincentivos para que la venta avance. El proceso está siendo coordinado por Royal Bank Of Canada (RBC). Mubadala, Swiss Life y GIP declinaron realizar comentarios tras ser contactados por este medio. CDPQ no contestó.
El proceso pondrá fin a casi una década de OPTrust como accionista de Globalvia. El fondo de pensiones tomó el control con el británico USS y el neerlandés PGGM cuando adquirieron en 2015 el 100% del capital que estaba en manos de Bankia y FCC, que hasta el momento se repartían el total al 50%.
Gigantes interesados
Los interesados por Globalvia son inversores de relevancia que han tomado posiciones en España en pocas empresas, pero muy significativas. Mubadala es propietaria de la petrolera Cepsa desde el año 2011 -vendió parcialmente a Carlyle un 37% en 2019- y busca en paralelo tomar una mayoría del grupo tecnológico Babel, mientras que GIP tiene una participación significativa en Naturgy (20,6%).
Swiss Life, que participa desde Swiss Life Asset Managers, su plataforma de capital de infraestructura con más de 10.000 millones de euros en activos bajo gestión, ha tejido alianzas en el mundo asegurador con Mapfre en el sector inmobiliario y ha apostado fuerte por el sector de las infraestructuras con la compra de las autopistas Brisa en Portugal. CDPQ, por su parte, ha estado activa tomando participaciones minoritarias de negocios de empresas españolas en el extranjero, como en la creación de FiBrasil con Telefónica, y en España ha volcado sus esfuerzos en la industria de las renovables.
El interés de los postores, que, a diferencia que los fondos de private equity, comparten una vocación de permanencia a más largo plazo, se debe al crecimiento sostenido de la compañía. La firma ingresó el pasado ejercicio 488,7 millones de euros, lo que supuso un récord histórico. Su resultado bruto de explotación superó los 290 millones de euros.
La compañía que dirige Javier Pérez Fortea y preside Marieta del Rivero obtuvo estos resultados al apoyarse en su negocio principal, el de la gestión de autopistas - representa aproximadamente el 80% de todas las ventas-, en el que logró superar los niveles de tráfico previos a la pandemia. En los últimos años, la firma ha ido diversificándose y tomando posiciones en la industria de la movilidad, con la toma de una participación significativa (24%) del operador ferroviario Iryo y de la totalidad de Go- Ahead con Kinetic.
El sector de las infraestructuras en España vive con esta operación una de las transacciones más relevantes, después de que diversos procesos similares iniciados en 2023 se hayan enfriado. Es el caso de la minoría de Roadis (30%), donde PSP Investments abrió un proceso competitivo para dar entrada a un socio en la concesionaria.
De cualquier forma, la de Globalvia es una de las grandes operaciones corporativas de este 2024. La puja está entre las más significativas por tamaño en la recta final de año, solo superada por Urbaser o la potencial oferta pública de adquisición (opa) de Brookfield por Grifols. El gigante de los residuos del fondo Platinum arranca también en el último trimestre su proceso de venta por hasta 5.000 millones de euros, mientras que el fondo canadiense ha pedido más tiempo para decidirse para poner una oferta por aproximadamente 9.000 millones.