El Banco Santander mantiene vacante la presidencia de la entidad en España desde que Rodrigo Echenique dejó el cargo el pasado 31 de diciembre, por cuestiones personales. El grupo, que vio truncados sus planes de sucesión el pasado enero tras decidir dar marcha atrás al nombramiento del banquero italiano Andrea Orcel como consejero delegado, lo que hubiera supuesto que José Antonio Álvarez, actual consejero delegado, ocupara los asientos que Echenique dejaba vacantes, busca desde entonces un sucesor adecuado y prevé nombrar nuevo presidente de Santander España antes de que finalice junio, según informan fuentes conocedoras de la operación.
La presidenta Ana Botín persigue consensuar la estructura organizativa mantenida hasta el momento con Echenique y Álvarez, dos pesos pesados del banco que controlaban los principales puestos de poder del banco. Echenique como número uno de Santander España y vicepresidente ejecutivo del consejo de administración y Álvarez, como consejero delegado.
La labor de ambos dos además daban un apoyo de asesoramiento en las decisiones a la presidenta del grupo cántabro. Bajo esta misma idea, la búsqueda del relevo de Echenique para España pasa porque el nuevo sucesor también sea capaz de erigir esta posición como pilar en la toma de decisiones, creando un nuevo tándem en el que se mantendría Álvarez como consejero delegado y vicepresidente ejecutivo del órgano rector.
Marcha atrás a Orcel
De momento, el banco tiene una lista con varios nombres de los que aún no hay un candidato claro pero que se resolverá antes del cierre del primer semestre del año, según las mismas fuentes. Tras la marcha atrás de la contratación de Orcel, responsable de inversión de UBS en Reino Unido hasta el pasado mes de septiembre, Echenique se ha mantenido en el banco a la espera de que llegue su relevo.
La presidenta del grupo Ana Botín aseguró el pasado 30 de enero al hasta, fecha en la que se presentaron los resultados anuales de la entidad, que confiaba en que Echenique no tuviera prisa en marcharse y dejara tiempo necesario al banco para poder estudiar con calma su relevo.
Sin cargos ejecutivos
No obstante, cabe matizar que cuando el Banco Santander anunció el pasado mes de junio la retirada del que era presidente de la entidad en España y vicepresidente ejecutivo del banco una vez finalizara el ejercicio, el grupo aseguró que Rodrigo Echenique sólo dejaría las funciones ejecutivas pero continuaría como vicepresidente del Banco Santander y como miembro de la comisión de nombramientos del consejo. De hecho, el pasado jueves, el banco le nombró consejero de la filial chilena, tras la renuncia de Andreu Plaza.
