El banco sueco Nordea está preparando una reestructuración de su negocio con la que podrá esquivar la regulación bancaria que se impone en la Eurozona y la Unión Europea. El pilar principal de este plan consiste en deshacer las filiales que Nordea tiene en Finlandia y Dinamarca, para establecer una única sede en Estocolmo, capital de Suecia. | La lección de Dinamarca sobre rescates bancarios: dejar caer duele, pero es más sano
Según explican desde Bloomberg, de este modo Nordea podría esquivar un número importante de normas y preguntas de los organismos reguladores presentes en Dinamarca y Finlandia (zona euro). El banco mantendrá abiertas sus oficinas en estos países, pero no tendrá una sede o filial oficial en dichos Estados.
Desde Finlandia no han tardado en mostrar su descontento por los peligros que entraña para la estabilidad financiera la decisión de Nordea. Este banco tiene a día de hoy una capitalización bursátil que duplica a la de Deutsche Bank, además tiene su negocio muy concentrado en los países nórdicos. Anneli Tuominen, directora general de la Autoridad Supervisora Financiera en Helsinki, asegura que "su prioridad ha sido que la legislación de la Unión Europea se implemente también para los bancos extranjeros que tienen una presencia sistemáticamente importante".
"Esto debe abarcar la participación en la toma de decisión, el intercambio de información y la implementación de políticas macroprudenciales", destaca el supervisor de Finlandia.
Unas reglas diferentes
En la actualidad y según las normas vigentes, Suecia no está obligada a respetar las políticas macroprudenciales adoptadas por sus vecinos de la Unión Europea, puesto que este país a pesar de pertenecer al bloque comunitario mantiene algunas singularidades.
Jesper Berg, director de la Autoridad Supervisora Financiera de Dinamarca asegura que esta configuración actual hace "muy complicado" imponer reglas estrictas de forma equitativa, como pueden ser la limitación del crédito. Si Nordea finaliza la reestructuración que ha anticipado, el regulador danés no podrá utilizar los mismos estándares reguladores sobre este banco.
Berg critica la reestructuración de Nordea, porque cree que ese no es el espíritu europeo. Aún así, Dinamarca tiene previsto aprobar el movimiento del banco sueco, pero eso no quita que Dinamarca y Finlandia estén trabajando de forma conjunta para establecer un memorando de entendimiento.