El sector asegurador desembolsó a lo largo de todo el año pasado indemnizaciones por valor de 56.300 millones de euros, según ha ofrecido Unespa en su memoria social del seguro que realiza anualmente. No existen datos comparativos con el ejercicio anterior, pero sí se puede comparar con la facturación de las compañías en 2024, que ascendió a 75.160 millones de euros. Es decir, tres de cada cuatro euros ingresados por las entidades fueron destinados a reclamaciones.
Asimismo, las aseguradoras resolvieron el año pasado 182 millones de percances, un 5,7% menos que en 2023 a pesar de que en 2024 sucedió uno de los siniestros más importantes de la historia de España: la DANA de Valencia. En total, en 2023 se registraron 193 millones de percances, impulsado además de por los numerosos eventos climáticos, por la gran sequía que asoló a la agricultura española hace dos años.
La patronal del seguro incidió en la presentación del informe todo el operativo que desplegó el sector para afrontar las inundaciones en la provincia de Valencia, así como en algunos municipios de Cuenca y Albacete. "Desde el primer momento nos dimos cuenta que iba a ser una situación excepcional, y por ello nos pusimos en manos del Consorcio de Compensación de Seguros (CCS) para lo que necesitasen" explicó la presidenta de Unespa, Mirenchu del Valle.
A los quince días, el sector asegurador y el CCS firmaron un memorándum de colaboración para agilizar la tramitación de siniestros y apoyar a los equipos del ente público. Fruto de este acuerdo, prácticamente el 50% de las incidencias han sido gestionadas primeramente por las compañías para facilitarle los trámites al Consorcio.
Este organismo estimó en un principio que el coste total de la DANA rondaría los 3.500 millones de euros, aunque finalmente, tras casi 250.000 notificaciones de siniestros, la cifra se elevó a 4.500 millones de euros. A esto hay que sumarle lo que asumen directamente las aseguradoras, porque en algunos casos las riadas no fueron las causantes de los daños. Es por ello que entre las compañías privadas han pagado a sus asegurados 192 millones de euros, lo que situaría este evento climatológico como el tercero más costoso debido a que el CCS cubre la mayoría. Por delante está la borrasca Gloria de 2020, con 306 millones; y la borrasca Filomena en 2021, con 235 millones.
Los daños por granizo y nieve son una histórica reclamación por parte de las compañías aseguradoras hacia el Consorcio. De ahí que a pesar de la magnitud de la DANA, el coste privado de las otras borrascas las supere, debido a la menor intervención del ente público. Fuentes del sector afirman que desde un pool de compañías se lleva años trabajando en informes muy profundos para la justificar que el Consorcio debe cubrir este tipo de riesgos.
Aumenta la penetración del seguro
En cifras generales, la penetración del seguro no hace más que crecer en el país. A cierre del año había 34 millones de coches asegurados por los 33,4 millones de 2023. Los clientes del seguro de salud también crecen en 200.000 personas, hasta los 12,6 millones; hay casi 700.000 participantes más de fondos de pensiones gestionados por aseguradoras (5,1 millones en total) y de asegurados en vida riesgo (21,8 millones de personas); se roza el 80% de hogares asegurados, hasta las 21,6 millones de viviendas; aunque el crecimiento más importante lo protagoniza el seguro de viajes, que se triplica hasta los 15 millones de asegurados.
Esta mayor presencia también se refleja en el ahorro gestionado, que en 2024 rozó los 270.000 millones de euros, así como en la protección del tejido empresarial. En 2024 se registraron 3,9 millones de pólizas de seguros multirriesgo, de crédito y caución, transportes y responsabilidad civil entre otros. Las entidades desembolsaron 3.255 millones de euros por indemnizaciones a las compañías.
Asimismo, los capitales asegurados en España ascienden a 18,1 billones de euros, lo que equivale a 12,4 veces el Producto Interior Bruto (PIB) del país.