
Banco Sabadell se aferra al recorrido de su proyecto en solitario para repeler la opa de BBVA. "Imagínese que hubiésemos invertido 10.000 euros el 29 de abril de 2024, que es cuando se planteó la opa, ahora valen aproximadamente 18.000 y si hubiésemos invertido en el BBVA en aquel momento ahora tendríamos 13.000", expuso este lunes el presidente del banco, Josep Oliu.
El banquero participaba en el "V Foro Empresarial: El resurgir empresarial de Catalunya", organizado por elEconomista.es y se le preguntó sobre su percepción sobre la operación y cómo espera que actúe el Gobierno. Se limitó a señalar que "el Gobierno y, sobre todo su ministro de Economía, es una persona muy seria" y "harán un trabajo serio" tras haber recogido las opiniones y temores de "mucha gente", pero sin querer entrar a elucubrar sobre su resolución final.
Sin embargo, sí detalló que desde que se lanzó la opa "el entorno ha cambiado muchísimo" y se ha producido una "reacción social", que debería tener en consideración el Ejecutivo al evaluar si se dan riesgo de interés general en la transacción para intervenir.
El banquero centró el discurso defendiendo el valor del Sabadell. Al respecto recordó que el consejo del vallesano rechazó la fusión con BBVA en 2020 al considerar que "aquel valor, en los términos que se planteaba por la otra parte, no eran convenientes a nuestros accionistas". "Imagínese si no eran convenientes que 10.000 euros invertidos entonces hoy son 98.000. Tampoco nos hubiese ido mal invirtiendo con BBVA, pero esos 10.000 hubiesen sido 48.000. Creo que nosotros, desde el punto de vista de la responsabilidad frente a los accionistas, tomamos la decisión correcta. Hemos multiplicado por nueve", resumió.
A tiempo presente y desde que BBVA lanzó la opa hace ahora un año, indicó que esos mismos 10.000 euros son 18.000 hoy y deslizó que el vallesano ultima una nueva hoja de ruta "donde presentará unos planes de cara al futuro para Cataluña y para el resto de España, con foco en la empresa y el crecimiento".
Oliu reconoció que la última palabra en una opa corresponderá al accionista, augurando que no saldrá si BBVA no mejora la oferta ya que el Sabadell cotiza hoy un 8% por encima del canje propuesto. "¿Cuál va a ser la oferta? Si es esta no va", pronosticó. A la hora de decidir expuso que el inversor también tendrá que dirimir si quiere "vender un proyecto de empresas en España y de éxito de España, para comprar un proyecto que también es de éxito, pero cuyo foco no es español, sino emergente en el 70% de su composición" en alusión al peso de geografías como México y Turquía en las cifras de BBVA.
En su opinión, "la sociedad civil catalana" y empresarial consideran que Sabadell es un "elemento esencial" para configurar la cohesión empresarial y territorial por su modelo de trabajo, donde dijo que prima la proximidad en la relación. "Si el Sabadell desapareciera ellos se quedarían huérfanos", zanjó.
Durante el mismo foro, el presidente de la patronal Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre, defendió la necesidad de que Sabadell continúe independiente exponiendo que su desaparición supondría un descenso en la disposición de crédito, sobre todo para las pymes, "de 70.000 millones de euros" en el conjunto del país. El empresario pidió expresamente al Ejecutivo que "prohíba la fusión sine die entre el Banco Sabadell y BBVA".
"Para nosotros, para Foment del Treball, es una cuestión de interés general y, por tanto, entendemos que el Gobierno de la nación, el Gobierno de España, tendría que implementar toda una serie de medidas que evitaran que esta fusión se produjera. Poner cuantas más trabas, obstáculos y mecanismos financieros estuvieran en su alcance para que no se produjera esta fusión o que se prohibiera sine die", reclamó.
Según el presidente de Foment, una fusión "dos más dos nunca son cuatro cuando hay una opa de dos entidades financieras respecto a los clientes" y el crédito que obtendrían si prospera la opa sería "como mucho dos y medio".
A su juicio la crisis interna que sufre hoy el Gobierno no debería afectar a su actuación al respecto. "No es obvio para que no se tomen decisiones importantes por el bien del país. La legislatura no se ha acabado", apuntó.