
Cuando se trata de ir a la caza de la rentabilidad más jugosa de un depósito bancario, los españoles están cada vez más dispuestos a mirar más allá de sus fronteras nacionales. Sobre todo cuando las entidades extranjeras afinan sus estrategias de publicidad y, también recurriendo a plataformas de ahorro, se empeñan en dar a conocer a un amplio público internacional el apetitoso rendimiento de sus productos.
Los datos del Banco Central Europeo (BCE) reflejan un progresivo aumento de la migración del ahorro al extranjero: el volumen de dinero colocado en depósitos europeos por parte de los hogares españoles se duplicó en los últimos seis años, al pasar de 6.200 millones de euros a 12.500 millones. Una tendencia que vio un fuerte acelerón en el primer trimestre de este año, con una subida que acaricia el 32% frente a los últimos tres meses del 2024, un incremento sin precedentes.
El cóctel que genera este impulso tiene varios ingredientes. Las fluctuaciones en los rendimientos de los depósitos reflejan los movimientos de Fráncfort en su política monetaria: cuando el BCE baja los tipos, las rentabilidades descienden, y, en cambio, cuando los sube, estas se elevan. Sin embargo, los bancos extranjeros suelen ofrecer rentabilidades más suculentas. De hecho, en el ranking compilado por el BCE de los 21 países con el tipo medio más elevado en depósitos a plazo fijo, España se queda rezagada.
En abril, por ejemplo, la rentabilidad media de los depósitos de hogares españoles fue del 1,99%, detrás de Francia (2,24%), Países Bajos (2,45%) e Italia (2,53%). El refrán "La hierba del vecino siempre es más verde" queda demostrado. Un dato curioso es que en el mismo mes, España dio el sorpasso a Alemania (1,96%) y a Luxemburgo (1,87%), que durante el último año siempre han estado por delante. Grecia y Chipre se situaron a la cola, con un rendimiento del 1,32% y del 1,25%, respectivamente.
Comunicación eficaz
La disposición a cruzar fronteras se debe también a una creciente percepción de cercanía cultural hacia los otros países de la Unión Europea, que reduce el miedo a la hora de embarcarse en un terreno todavía inexplorado. Ante una mayor apertura, las entidades extranjeras han intensificado sus campañas publicitarias para dar una mayor visibilidad a sus productos fuera de su país. "Hacen una comunicación que es más rompedora, con una imagen muy diferente a un Santander o un Sabadell que garantiza estabilidad, pero no ofrece productos tan revolucionarios como estos bancos extranjeros, que vienen y que presentan todo rápido y online. A la gente le gusta", asegura Marta Pinedo, directora de Raisin España. Esta plataforma permite contratar depósitos en diferentes bancos europeos, como con el italiano Banca Progetto (2,75% TAE), o el portugués Haitong (2,74%).
Varios bancos han adaptado sus páginas web -el ya citado Haitong y el francés Younited cuentan con una versión en español- para facilitar la búsqueda al extranjero, apunta Javier Mezcua, experto en HelpMyCash. "Ahora ya con unos clics y hablando español puedes descargarte el contrato y leerlo. También ayuda a que las transferencias SEPA entre países de la UE sean gratuitas y que todos los países tengan un fondo de garantía de depósitos que le da tranquilidad a la gente", agrega.
Aunque la hucha de dinero guardado en depósitos extranjeros se haya ensanchado, España sigue a la zaga frente a otros países de la UE. El porcentaje de depósitos que los españoles han abierto en el extranjero alcanza apenas un 1% del total, por debajo del 9,5% de los chipriotas y del 7,5% de los luxemburgueses.
En términos de volumen, los países que más dinero han depositado en el extranjero son Alemania (62.000 millones), Países Bajos (18.900 millones) y Francia (17.200 millones). "Países Bajos está muy abierto en cuanto a la lengua y Alemania está llena de pequeños bancos regionales: los clientes no tienen un banco de referencia que sea la opción natural en la que van a estar toda la vida, sino que buscan más, a diferencia de lo que ocurre en España".
Francia, el que más recibe
En cambio, los países en los que los bancos han recibido el mayor volumen de depósitos por parte de otros países son Francia (30.000 millones), Luxemburgo (28.900 millones), Alemania (25.000 millones) e Italia (15.200) millones. Este último país registró el mayor crecimiento en términos absolutos en los últimos cinco años. "Es posible que en Italia, debido a una menor confianza hacia la economía, las entidades tienden a pagar más.
Francia, por su parte, cuenta con un producto regulado que dispara la rentabilidad media de los productos", añade Mezcua. Los expertos consultados coinciden en que la tendencia de buscar rentabilidades fuera de España continuará al alza en los próximos meses, al tener en cuenta, además, el entorno de tipos a la baja que anima a los clientes a buscarse más la vida para conseguir las mejores rentabilidades.
Mezcua cree que los rendimientos de los depósitos seguirán siendo rentables, pero es posible que se ajusten algo más a la baja, dependiendo de las maniobras del BCE. "Puede también que se estanquen y habrá países que pagarán mejor que España, abriendo oportunidades fuera", zanja. De su lado, Pinedo destaca que, a pesar de la relajación de la política monetaria, algunas entidades han subido sus rentabilidades, como CF+ o SME Bank. Por tanto, su evolución no siempre es tan previsible como parece.