VIAJE DE LA SEMANA
Tenemos mil y un motivo para dejarnos caer por Lisboa. Una ciudad que se caracteriza por la belleza de sus calles, sus numerosos monumentos y su rica gastronomía. La visita a la famosa Pastelería de Belém es una parada obligatoria para cualquier visitante. Pero en verano la capital portuguesa se convierte en una ciudad que ofrece mucho más para todo aquel que desea descubrir su vida cultural.