A Kiki Morente no le gustan los paparazzi. En este aspecto se parece mucho a su novia, Sara Carbonero, y qué mejor lugar para refugiarse que la bella y mágica Granada, su tierra chica, donde ha vuelto después de un breve paso por Oporto. En la ciudad de la Alhambra, Kiki vive al amparo de su amplia familia, una saga de artistas de tronío que encabezaba su padre, el fallecido Enrique Morente, su madre, la bailaora Aurora Carbonell, y que perpetúan sus hermanas, Estrella y Soleá.