Le llaman 'el padrino' con ironía por su afán de proteger a los miembros de la familia Campos en Viva la vida, el programa que dirige los fines de semana. Raúl Prieto da cobijo a las dos hijas de María Teresa Campos, Terelu y Carmen Borrego, y a su nieta Alejandra Rubio. Ya solo falta que busque acomodo a la matriarca, y el puzzle será completo. No tiene mucho presupuesto, pero si el suficiente para que el trío 'campestre' haga frente a los gastos cotidianos.
Las dimensiones del enfrentamiento entre Kiko Rivera y su madre traspasan fronteras. Isabel Pantoja sigue siendo una estrella en Latinoamérica y unos empresarios mexicanos del mundo de la televisión quieren llevar la polémica a la pequeña pantalla.
Algo muy fuerte debió ver Kiko Rivera el día dos de agosto en la habitación 'maldita' de la finca Cantora para que sus abogados le recomienden que calle. Y no tiene nada que ver con las pertenencias de Paquirri. ¿Qué esconde su silencio? ¿Podría ser algo que linde el límite de lo delictivo?
Unas cintas que pudieron llevar al divorcio, de Francisco Rivera Ordóñez Paquirri e Isabel Pantoja, una prima de Isabel demasiado cariñosa, los encuentros secretos con Carmina Ordóñez, una miss colombiana muy ardiente, una belga trotamundos… Son las últimas pinceladas que dan color y enmarañan el culebrón de Cantora.
A Isabel Pantoja no le entra en la cabeza que la empresa que le paga sea la misma que se ensaña con ella. Mediaset, personificada en Paolo Vasile, convierte a la madre de Kiko Rivera en un juguete roto con el que se ceban todos los programas corazoneros de sus cadenas. Una cosa es la escandalosa entrevista de Mila Ximénez a Kiko en Lecturas y otra que Telecinco, su propia cadena, la humille.
La ambición dineraria de Isabel Pantoja no tiene límites, y Diego Gómez, un empresario que salió con ella durante cuatro años y con quien rompió en 2003, lo sabe bien. Él fue víctima colateral de un amor por el dinero que superaba los sentimientos.
La fe y el culto a la religión son inquebrantables en la familia Pantoja, tanto que Kiko Rivera, animado por el padre Rayo, su confesor en el colegio San Patricio, planteó a su madre su intención de entrar en el seminario para convertirse en sacerdote.
Sus vecinos le llaman el marquesito de Galapagar pero la verdad es que al vicepresidente Pablo Iglesias le entra urticaria cuando al aristócrata morado le hablan de cualquier tema relacionado con nuestra Casa Real, y pasea su republicanismo con pasión; le da igual formar parte del Ejecutivo del Reino de España, y su cargo no frenar sus gestos anti monárquicos.
El pasado martes 17, Alejandro Sanz mandaba un "Te quiero" muy especial al hombre de su vida, un joven al que todos conocen con el nombre de Kyd y que ese día celebraba su mayoría de edad.
El espíritu de Paquirri se venga de Isabel Pantoja. Un caso paranormal digno de ser investigado por el gran Iker Jiménez, el tema daría para llenar varios programas de Cuarto milenio, y de un 'quinto' si fuera menester.