David de Gea ya está en Madrid. El arquero retornó ayer de sus vacaciones por tierras asiáticas junto a Edurne, su pareja. Su presencia en la capital (presencia cazada por algunas televisiones y periódicos como As) nada tiene que ver, por el momento, con su futurible fichaje por el Real Madrid. Era una parada prevista ya de antemano, aunque el jugador tiene intención de convertirlo en una parada definitiva. Es decir, David de Gea tiene intención de no regresar ya a Manchester. Su único deseo es quedarse en España para empezar el viernes de la semana que viene su preparación con el equipo merengue.

Este miércoles fue un día movido para el FC Barcelona. Dos nombres acapararon los focos. El primero, Paul Pogba y su 'no-fichaje' por los culés. Desde el Barça se apresuraron por anunciar un acuerdo que en Italia niegan y que desde los candidatos rivales de Bartomeu califican de movimiento electoralista. El segundo nombre fue el de Arda Turan. El turco del Atlético de Madrid también fue anunciado como futurible fichaje culé, aunque, como en el caso del galo, no hay acuerdo ninguno. Sin embargo, al contrario de lo que sucede con el la Juventus, el traspaso tiene visos de poder acabar en éxito.

Paul Pogba no es nuevo jugador del Barça. Tampoco existe acuerdo alguno con el francés o con su club, la Juventus, para que acabe en el Camp Nou la próxima temporada. Todo son fuegos de artificio. Juego de titulares electorales con una novedad importante con respecto a lo visto en anteriores procesos electorales. Esta vez, el propio club, la junta gestora que lo dirige, se ha convertido en parte del proceso y actúa, según los candidatos de la oposición, a favor del presidente saliente, a favor de Josep María Bartomeu.

Argentina ya está en la final de la Copa América. La 'Albiceleste' ha arrasado a Paraguay (6-1) y lo ha hecho sin un sólo gol de Leo Messi. No es novedad. A la 'Pulga' le sigue pensando su maldición con el combinado nacional. Él mismo se sorprende de lo que le cuesta hacer goles cuando se quita la camiseta del Barça y se enfunda la de su selección. Lo dijo tras los cuartos de final, cuando, de nuevo, no vio puerta contra Colombia pese a tener un buen puñado de grandes ocasiones. En lo que llevamos de torneo no ha logrado ni un sólo tanto y eso, en otros momentos, le llevaría a la desesperación y el bloqueo. Pero el Messi de esta temporada es diferente. Ha sabido canalizar esa frustración hacia otras vías que le permite brillar igualmente sin destrozar las redes rivales. Por eso es, a día de hoy, el máximo candidato a ganar el Balón de Oro, el quinto de su carrera.