El presidente de la Fundación Telefónica, César Alierta, ha explicado que la digitalización "no es una opción para las empresas" y que aquellas compañías que no afronten esta transformación "van a tener un problema". Un proceso en el que la formación es clave. De hecho, el 20% de la plantilla de las empresas, como mínimo, debe ser digital. Unos perfiles profesionales que escasean porque hay 105.000 puestos de trabajo sin cubrir.
César Alierta ha explicado la importancia de la digitalización de la sociedad, la economía y las empresas durante el acto de celebración del décimo aniversario de la empresa tecnológica Libelium.
El presidente de la Fundación Telefónica ha incidido en que las empresas deben ser digitales. "La digitalización no es un opción. Las empresas tienen que darse cuenta de que tienen que ser digitales", ya que las que no lo sean y no afronten esta transformación "tendrán un problema tremendo. Las empresas digitales inteligentes tienen mejores resultados".
En este salto a la digitalización, las empresas se encuentran con el handicap de la falta de profesionales formados. "El 20% de la plantilla, como mínimo, debería ser digital". Sin embargo, son perfiles que escasean en la actualidad porque hay alrededor de 150.000 puestos de trabajo sin cubrir por falta de estos profesionales mientras que "se habla de paro juvenil. De ellos, el 60% solo tiene estudios de Primaria".
Una demanda de profesionales que se prevé que vaya en aumento, puesto que se calcula que se van a necesitar en los próximos años 3,5 millones de profesionales digitales, "pero no se está preparando" a los jóvenes.
Alierta también ha incidido en la necesidad de que la educación y la formación sea digital, proceso que cuesta introducir "porque a los rectores los eligen los catedráticos, que hacen la oposición" para posteriormente -salvo con algunas excepciones-, dar el mismo contenido durante 20 años. "Dar MOOCs y digitalizar la educación cuesta porque hay que ponerse al día".
Una digitalización de la educación que no se realiza a pesar de que "el 65% de los chicos de Primaria trabajarán en profesiones que hoy no existen. Hay que preparar a las nuevas generaciones en temas digitales porque va a haber demanda de nuevos profesiones que van a aparecer en cinco años".
César Alierta ha incidido en que la digitalización y el Big Data "lo están cambiando todo. La clave del progreso de la humanidad se basa en dos pilares; educación e innovación", aunque "ningún progresista habla de ello".
El presidente de la Fundación Telefónica ha señalado que la "innovación es fácil con el Big Data. Se innova sabiendo lo que quiere la gente, sus necesidades. Antes se hacían encuestas, pero ahora con millones de datos disponibles se tiene la información de lo que se quiere y con ello se puede ser disruptivo".
Economía digital
La digitalización de la economía y de las empresas presenta además una serie de ventajas. "Las empresas digitales tienen una visión de 360 grados del cliente y de sus socios", además de "ser más competitivas", pero hay que "hacer la digitalización en todo el proceso, de punta a punta. Se trata de ser parte de la cadena del ecosistema digital".
La digitalización de la economía también tendrá un impacto positivo en la sociedad. De hecho, se estima que "un crecimiento del 10% de la economía digital supone un aumento del 40% del PIB per cápita".
Una digitalización que también se hace necesaria porque "el 80% de la población mundial será urbana y necesitan y quieren unas ciudades más eficaces, aunque no hay muchos alcaldes sensibles" a este tema. Además, en general, salvo el presidente de EEUU, Barack Obama, y la canciller alemana, Angela Merkel, no hay concienciación de la importancia de la digitalización. "Ningún político habla de la digitalización y no hablan porque no lo saben, pero estamos delante de la mayor revolución en la historia. No hay que estar deprimidos cuando ha comenzado la mayor revolución, la del mundo digital".
Tampoco hay que olvidar que se está en un mundo globalizado. "España está en una situación que es la envidia del mundo porque somos 47 millones", pero el país tiene acceso a un mercado natural de 1.000 millones de personas: 600 millones de Europa y 400 millones de América Latina.
Una globalización ante la que ha indicado que el Brexit -salida del Reino Unido de la Unión Europea- no tendrá importantes repercusiones porque "65 millones de británicos no es nada en un mundo global. Lo van a pasar fatal".
