China, Estados Unidos o Reino Unido son algunos de los mercados que se han rendido a esta ginebra, 100% española y realizada desde Zaragoza, que se caracteriza por la exclusividad de su sabor a eucalipto o bergamota. Un producto que cada vez está abriendo más mercados exteriores, comercializándose ya el 80% de la producción a nivel internacional. El siguiente paso es llegar a Sudamérica.
Ginebra y Aragón no son dos palabras que tradicionalmente hayan ido de la mano, al menos, hasta la aparición de Ginbraltar. Una ginebra 100% española y nacida en Zaragoza, que está conquistando tanto el mercado nacional como el internacional con sus dos variedades en las que se utiliza el eucalipto, en el caso de la botella roja; o la bergamota, en la botella amarilla, que se lanzó con posterioridad.
Desde el inicio de su comercialización, en agosto del año 2013, la aceptación de esta ginebra ha ido creciendo exponencialmente, haciéndose un hueco en el mercado en el que hay alrededor de 1.800 referencias de ginebra. Su presencia, sobre todo, es más relevante en los mercados exteriores, que concentran en la actualidad el 80% de las ventas.
Reino Unido, mercado destacado
De hecho, Ginbraltar ha conseguido conquistar a los consumidores ingleses, siendo el Reino Unido uno de sus principales mercados. Además, también se comercializa en "Portugal, Italia y Dinamarca desde donde se vende a Noruega, Finlandia y Suecia", según explica Enrique Bardavio, impulsor de esta iniciativa, a elEconomista.es
Unos mercados a los que se suma, desde enero de este año, Estados Unidos, donde Ginbraltar se vende, por ejemplo, en Georgia, Colorado, Nebraska, Nueva York, New Jersey, Texas, Missouri y Pensilvania.
La ginebra este año llegará a más mercados. "En septiembre vamos a empezar a vender en Francia y en Hong Kong y China", además de abrir también el mercado de Ucrania en el que se prevé que Ginbraltar llegue en el mes de mayo.
El siguiente paso que se ha marcado la empresa es Sudamérica, mercado para el que "estamos buscando importadores" y que es de interés para Ginbraltar ante la importancia en estos países de la coctelería y porque, "poco a poco, se van introduciendo modas europeas". De hecho, esta ginebra puede utilizarse para coctelería, puesto que ya se ha probado para la preparación de bebidas como el mojito, además de maridar bien con el cóctel italiano Negroni.
Ginbraltar también tiene aceptación dentro del mercado español, que en la actualidad concentra el 20% de las ventas, comercializándose en Aragón, la zona de Levante y La Rioja, estando previsto continuar con su expansión por otras comunidades autónomas como Castilla-La Mancha.
La ginebra se comercializa para el canal horeca, que representa el 75% de las ventas actuales, así como en grandes superficies, que suponen el 25%. Un segmento este último en el que se adentró "porque había demanda y la gente preguntaba dónde se podía comprar".
Su demanda crece por su elaboración y sabor y se espera que siga aumentado de la mano de la apertura de más mercados, sobre todo, exteriores porque "en España el mercado está hipersaturado de ginebras y las grandes marcas tienen presupuestos elevados por lo que hay que utilizar el ingenio y hacer cosas diferentes y originales".
De hecho, la producción para este año se estima en 30.000 unidades, cifra que contrasta con las 11.000 unidades que se comercializaron el primer año y que se elevaron hasta las 18.000 unidades del segundo año de actividad. Un producto al que, además, se sumará en breve plazo un complemento a la ginebra para que aporte un valor añadido.
Una idea nacida de una broma
La historia de Ginbraltar se remonta al año 2011 y surgió de una broma entre gintonics elaborados con ginebra inglesa.
Un momento en el que se vieron noticias en televisión sobre el conflicto producido con las patrullas de pescadores en Gibraltar. "Y así surgió de comentarios sobre que no nos dejan faenar, pero les comprábamos la ginebra. Se dijo de broma, nos reímos y todo quedó ahí pero, más adelante, lo pensé, estudié el mercado, registré la marca y me puse a trabajar con un amigo químico y una destilería".
Y el resultado de ese trabajo fue Ginbraltar con el lanzamiento de la botella roja con sabor a eucalipto, a la que posteriormente le siguió la botella amarilla con bergamota.
Dos productos diferentes en el mercado con los que se comenzó con pequeñas ventas que el propio emprendedor realizaba y que han ido creciendo progresivamente conquistando los paladares.
