Las ventas de hidrocarburos han caído un 8,6% en Aragón desde el pasado 1 de enero, un 9,10% el gasóleo, que representa el 80%, y un 5,3% las gasolinas, según la Asociación de Estaciones de Servicio de Aragón (AESAR), cuyos representantes han comparecido este martes en la Comisión de Comparecencias y Peticiones Ciudadanas del Parlamento regional.
Conforme sus cálculos, se están perdiendo 31 céntimos de recaudación por cada litro de gasóleo y 37 por cada litro de gasolina que deja de venderse. Según el Centro de Distribución de Carburantes, Aragón va a dejar de recaudar 965.734 euros por la subida del precio.
La presidenta, Pilar Soto ha atribuido este descenso de las ventas a la entrada en vigor del impuesto especial sobre determinados hidrocarburos, que grava con 2,4 céntimos, (2,9 con el IVA) cada litro de gasóleo o gasolina, lo que repercute, ha dicho, no solo en los grandes transportistas, sino también en los autónomos y familias. Ha pedido la "inmediata" supresión de este gravamen.
Soto ha alertado del "efecto frontera negativo" que sufren las estaciones próximas a las comunidades donde no se aplica este impuesto, como La Rioja y Castilla y León, haciendo notar que Aragón es una comunidad de paso para los transportistas, muchos de los cuales eligen repostar en otras regiones. Se han producido bajadas de ventas de hasta el 33 por ciento en algún caso y subidas en Castilla y León de un 130 por ciento en una estación próxima a Aragón.
La presidenta de AESAR ha subrayado que al caer las ventas también baja la recaudación, ya que la mitad del precio del carburante proviene de los gravámenes, una parte de los cuales los recauda la Comunidad Autónoma a través de la cesión tributaria.
Empleo
El vicepresidente de AESAR, Zoilo Ríos, ha expuesto que las estaciones gasolineras dan empleo a 1.522 personas, algunas sin mucha cualificación, y además generan puestos de trabajo indirectos en restaurantes, bares, talleres y tiendas ubicados junto a estas instalaciones.
Ha alertado de la proliferación de estaciones "desatendidas", sin personal, lamentando la "permisividad" de la Administración, y ha mencionado el caso de Italia, donde hay 22.000 gasolineras y han cerrado en pocos años unas 18.000 a causa del elevado coste y la falta de personal.
Ríos ha resaltado que los titulares de las gasolineras son pequeños empresarios, en muchos casos similares a los comerciantes, alejados de las grandes compañías petrolíferas.
Grupos
El diputado del PP, Fernando Galve, ha manifestado su apoyo a AESAR, criticando el "impuestazo", que "no afecta a los ricos o más ricos, afecta a todos los aragoneses". En representación del PAR, Lucía Guillén ha resaltado que los aragoneses pagan una media de tres euros más al mes por los hidrocarburos, lo que "ya se ha empezado a notar" y ha comentado que no solo han resultado afectados los grandes transportistas, sino también los propietarios de las pequeñas furgonetas de reparto. Ha arremetido contra el "afán recaudatorio".
Desde C's, Javier Martínez ha criticado que el Ejecutivo no asuma que subir los impuestos no conlleva recaudar más y ha señalado que el impacto sobre el consumo ha sido inmediato, apuntando que "muchas veces se consume por una cuestión de percepciones". Ha llamado la atención sobre el impacto del impuesto sobre el sector logístico.
El parlamentario del PSOE, Darío Villagrasa, ha justificado este impuesto porque hay una "prioridad política", las necesidades sociales, que obliga a recaudar más, indicando que el coste de los hidrocarburos estaba muy por debajo de la media nacional y sigue siendo menor.
Gregorio Briz, de CHA, ha dicho que los grupos que sustentan al Gobierno entendieron, al confeccionar la Ley de Presupuestos y la de Acompañamiento, que "era necesaria una subida de impuestos, no solamente el de hidrocarburos", para así recaudar y "atender una serie de necesidades sociales, perentorias, urgentes", una decisión "política" que "puede ser errónea o acertada". Se ha preguntado si la bajada de ventas se debe al efecto psicológico del nuevo impuesto.
El diputado de Podemos, Román Sierra, ha recordado que la formación violeta no recogió este impuesto en su programa electoral al no considerarlo progresivo: "Nuestra máxima es incorporar la progresividad" al sistema fiscal.