
La entidad ha formalizado 1.300 operaciones en el año 2020 con pymes y autónomos dentro de la línea ICO para atender las necesidades de financiación del tejido empresarial y productivo con motivo de la COVID-19.
Este volumen de operaciones supone que Caja Rural de Teruel ha firmado el 50% de todas las operaciones formalizadas dentro de esta línea ICO-COVID en la provincia turolense. "Hemos sido muy activos en préstamos ICO-COVID con pymes y autónomos" con la formalización de estas 1.300 operaciones que "hemos firmado de manera atomizada", ha explicado el presidente de Caja Rural de Teruel, José Cuevas.
En la provincia de Teruel, sectores como el turismo, la hostelería y el comercio figuran entre los más afectados por el impacto económico de la pandemia. "Todas las crisis impactan tengan el origen que tengan. Es una crisis sorprendente porque todas las que hemos vivido no han tenido origen sanitario; eran todas por motivo de consumo o liquidez. Al limitar la movilidad, afecta a la economía", ha añadido José Cuevas.
En la provincia de Teruel no todos los sectores se han visto afectados de manera negativa por el impacto de la COVID-19 como es el caso del agroalimentario que está teniendo un mejor comportamiento que, en parte, se ve impulsado por el cambio en los hábitos de las personas. La pandemia "nos ha cambiado la forma de comportarnos y de gastar" y esto está produciendo un doble efecto de aumentar el dinero que se destina a comprar productos agroalimentarios y a un incremento de los depósitos y el ahorro.
Además de las operaciones dentro de la línea ICO-COVID, Caja Rural de Teruel también ha participado y colaborado en otras iniciativas con el fin de minimizar el impacto económico de esta crisis sanitaria a través de los programas de bonos o el marketplace que se ha lanzado recientemente en Teruel.
Un libro para celebrar 100 años
Los datos de la actividad de Caja Rural de Teruel se han dado a conocer en el transcurso de la presentación en streaming del libro 'Caja Rural, cien años con Teruel', que ha sido editado por la entidad financiera que se ha realizado con motivo de la celebración de su centenario.
Un volumen con el que se pone el fin a todos los actos y actividades organizadas -algunas por la COVID-19 se han tenido que posponer-, que comenzaron el día 4 de febrero de 2020, fecha que figura en el documento fundacional de la caja, y que finalizan el 4 de febrero de 2021.
El libro realiza un recorrido por los 100 años de la caja rural, mostrando su historia y sus principales hitos desde sus orígenes con la fundación de la Federación Turolense de Sindicatos Agrícolas y Católicos (FTSAC) hasta la actual Caja Rural de Teruel.
También se recoge toda la transformación que ha vivido en este siglo de vida, desde los apuntes manuales a la mecanización hasta la implantación y llegada de la banca online y a distancia.
Este libro incluye fotografías, la cronología de los diferentes presidentes de la entidad, los calendarios que se han editado, las asambleas realizadas y las oficinas y edificio como el que acoge su sede centran el Teruel, entre otros muchos contenidos.
"No es un libro económico ni de balance, sino que es cómo nacimos, lo que somos, lo que ha pasado desde el nacimiento y la evolución", ha afirmado Ángel Espinosa, jefe del Área de Negocio de la entidad.
El resultado es un libro muy visual y gráfico con el que también se quiere rendir homenaje a las personas que han hecho posible la caja durante estos 100 años. "No estaríamos aquí sin las personas", ha incidido el presidente de Caja Rural de Teruel, quien ha afirmado que "estamos en un año complicado en el que el legado de estas personas tenemos que tenerlo sobre la mesa".
El libro se ha publicado en edición impresa con 1.000 ejemplares que serán repartidos, pero también está disponible de manera virtual a través de códigos que irán impresos en los folletos de la entidad. Igualmente, se puede acceder a él a través de la web librocentenario.es