
Con la vuelta al cole ya en marcha, muchas familias apuran estos primeros días para ajustar rutinas y poner orden en casa tras las vacaciones. Uniformes listos, mochilas preparadas y material escolar marcado forman parte del ritual de septiembre, y en ese contexto cualquier truco que haga más fácil la organización resulta especialmente valioso.
En profundidad
En ese punto, la organizadora profesional Begoña Pérez, más conocida en redes como La Ordenatriz, ha compartido en su perfil de Instagram algunos de los consejos que ella misma aplica en casa con sus hijos. Se trata de pequeños gestos que, según explica, no solo ayudan a mantener todo en orden.
"Se trata de crearles hábitos", resume Begoña, convencida de que lo importante no es tanto la perfección como la constancia. En su opinión, introducir rutinas adaptadas a la edad de los niños no solo ayuda a los padres a mantener el orden, sino que refuerza la autoestima de los hijos al sentirse útiles y responsables.
Más detalles
Entre los consejos más comentados está un remedio contra las ampollas en los pies: aplicar un poco de vaselina en el calzado nuevo para evitar rozaduras, un truco que, según ella misma confiesa, aprendió haciendo el Camino de Santiago. También recomienda marcar todas las prendas, libros e incluso zapatos con etiquetas adhesivas, más fáciles de retirar que los sellos de tinta, lo que permite reutilizar la ropa con otros hermanos.
Para mantener los uniformes impecables, sugiere añadir un cazo de percarbonato en el tambor de la lavadora una vez al mes. Según explica, este producto ayuda a conservar el blanco de las telas sin dañar la prenda, incluso cuando lleva algo de color.
Además de la limpieza, Pérez insiste en la importancia de instaurar rutinas que den seguridad a los niños. Desde los 5 o 6 años, propone que hagan su propia cama cada mañana, aunque no quede perfecta: "Lo importante es que lo intenten, así se sienten responsables y empiezan el día con una pequeña victoria".
También aconseja establecer un lugar fijo para estudiar y mantener siempre la misma hora para empezar las tareas. Cuando son pequeños, ese espacio puede ser la misma habitación en la que están los padres, por ejemplo, mientras preparan la cena. Lo esencial, explica, es crear un hábito que les aporte estabilidad.
A tener en cuenta
En sus redes, La Ordenatriz comparte también ideas que ella misma aplica en casa. Una de las que más éxito ha tenido es preparar el domingo los bocadillos de media mañana, envolverlos de forma individual y congelarlos. Así, cada niño puede sacar el suyo por la mañana y tenerlo listo a la hora del recreo.
Más allá de los trucos concretos, Pérez insiste en que la perfección no existe y que cada familia debe adaptar estos consejos a su situación. Lo importante es que los niños adquieran hábitos poco a poco y que los padres encuentren fórmulas sencillas para aligerar la carga de la vuelta al cole.
"Lo mejor es dejarles hacer, aunque no quede perfecto, porque así se sienten útiles, orgullosos de sí mismos y responsables", explica. Una manera práctica de transformar septiembre en una oportunidad para empezar con buen pie y, sobre todo, con más calma en casa.