
La empresa española Ienai Space lidera el proyecto Atalaia, financiado por la Agencia Espacial Española (AEE), que sentará las bases para la producción a gran escala de los sistemas de propulsión eléctrica Athena, según ha informado el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Estos motores ofrecen al mercado espacial una tecnología compacta, de alta potencia y capaz de integrarse en satélites de pequeño tamaño. El Instituto de Microelectrónica de Barcelona (IMB-CNM-CSIC) es uno de los colaboradores para la fabricación de los dispositivos de emisión.
Desde hace años, el campo de la propulsión espacial explora nuevos sistemas para impulsar los satélites a través de la propulsión iónica, más ligera y económica. Se trata de una tecnología que utiliza iones acelerados por campos eléctricos para generar un empuje que permite a los satélites alcanzar largas distancias con menor consumo de combustible. Un prototipo de estos sistemas se embarcó en el lanzador Alpha, que puso en órbita dos picosatélites (satélites con pesos menores a 1kg) equipados con los demostradores tecnológicos del motor Athena ('Adaptable Thruster based on Electrospray powered by Nanotechnology') desarrollados gracias a la colaboración del CSIC y la empresa Ienai Space.
Ahora, el proyecto Atalaia nace con el objetivo de aumentar la producción de propulsores iónicos de alto rendimiento a cientos de unidades al año, reduciendo costes, aumentando la confiabilidad y la reproducibilidad, y mejorando significativamente el rendimiento de los emisores de electrospray, técnica que utiliza campos eléctricos para generar un chorro de iones que acelera el propelente.
"Fabricaremos los emisores de electrospray y se investigarán nuevas estrategias de nanoestructuración de superficies que permitan minimizar la complejidad de la fabricación y su coste, así como maximizar la eficiencia de emisión del propelente", explica Borja Sepúlveda, investigador del IMB-CNM que lidera la colaboración.
Esta tecnología se manufacturará en la Sala Blanca de Micro y Nanofabricación del IMB-CNM-CSIC, una Infraestructura Científica y Técnica Singular (ICTS) reconocida por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, que cuenta con una amplia experiencia en procesos de micromecanización profunda de silicio por iones reactivos.
Tras la certificación, se espera que Athena se convierta en una tecnología de referencia en la propulsión eléctrica de próxima generación, a la vez que consolidará a los socios del proyecto como estratégicos en la cadena de suministro espacial global.
ATALAIA (Aplicación de Técnicas Avanzadas de Litografía y Fabricación Aditiva en el Desarrollo de un Propulsor Iónico de Alto Rendimiento) ha sido seleccionado por el Programa Tecnológico Espacial (PTE) de la AEE. Cuenta con un presupuesto total de más de tres millones de euros, de los cuales la AEE financia más de la mitad a través del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), y con el apoyo de los fondos de recuperación NextGenerationEU de la Unión Europea.