
¿Es posible rehabilitar y ampliar una masía del siglo XVII para convertirla en un hotel de cinco estrellas con materiales sostenibles como la tierra? La respuesta es 'sí'. Y es justo lo que ha hecho Edra Arquitectura Km0, especializada en construcción en tierra, en la localidad de Monroyo, en Teruel.
En esta antigua masía se han aplicado estrategias de la filosofía de trabajo de este estudio oscense, pionero en construcción sostenible en España y especialmente en construcción en tierra, basada en la descarbonización de materiales y soluciones constructivas y en implementar estrategias pasivas para crear edificios autosuficientes o de mínima demanda energética. Un eje que se sigue empleando los mínimos recursos y generando el menor impacto social y ambiental. Además, también se reduce la huella de transporte con el uso de materiales y soluciones locales, sin obviar el ciclo de vida del edificio antes y después de su vida útil.
Es una línea de trabajo en la que también se prima el bienestar tanto físico como mental y emocional de las personas que habitan o usan estos edificios, aparte de fortalecer la economía local mediante la colaboración con empresas y artesanos de la zona.
Toda esta base sustenta la rehabilitación y ampliación de esta antigua masía de Monroyo, que se ha convertido en el hotel Torre del Marqués, de cinco estrellas, usando tan solo sistemas constructivos tradicionales. Entre ellos, por ejemplo, se encuentra la tapia calicostrada, cuya utilización permite controlar la temperatura gracias a su inercia térmica.
También se han utilizado otros materiales locales de bajo impacto como es el caso de la tierra, la paja, cáñamo y madera. Todos ellos tienen en común el hecho de favorecer la creación de espacios saludables y confortables, respetando el entorno natural.
En el hotel destacan algunos elementos clave como los muros de tapia o los aislamientos naturales y piedra local. También se ha seguido una estrategia bioclimática, orientación y ventilación cruzada para reducir el uso de climatización artificial, entre otros elementos clave entre los que figuran la creación de un invernadero y otros sistemas de captación solar pasiva, entre otros. Es un sistema con el que se ha logrado reconectar con la arquitectura tradicional sin renunciar al confort contemporáneo.
Este proyecto le ha valido a Edra Arquitectura km0 el galardón del público en Construmat 2025, edición a la que concurría con otras 15 obras de 9 países. Entre los puntos valorados destacan la reinterpretación de la masía aragonesa con lenguaje actual y el uso de los materiales de proximidad, de bajo impacto y gran eficiencia.
Otros puntos a favor es la recuperación y modernización de técnicas artesanas y saberes locales, así como la incorporación de estrategias pasivas para reducir la demanda energética y generar valor turístico sin desarraigar el territorio. Este mismo proyecto de Edra, estudio liderado por Àngels Castellarnau, también fue seleccionado en el concurso internacional de arquitectura contemporánea TerraFibra Award en la edición de 2021.