Así es, existe una lámpara capaz de desinfectar el ambiente, eliminar los malos olores (que no es lo mismo que cubrirlos) y además perfuma el ambiente durante horas: se llama lámpara catalítica y está arrasando en las tiendas. Además, se trata de un elemento decorativo que le puede dar un toque totalmente diferente y elegante a cualquier estancia.
La lámpara catalítica nace en Francia en 1898 de la mano de Maurice Berger y su finalidad era limpiar y purificar el aire en hospitales y demás centros sanitarios, por su capacidad de eliminar las bacterias del ambiente. Sin embargo, poco a poco esta lámpara ha ido llegando a todo tipo de personas, ya que es un elemento decorativo perfecto para las casas, eliminando olores, incluso los asociados al tabaco, y deja un aroma que se puede elegir previamente.
Existen multitud de diseños, que destacan por su esencia clásica y elegante, con diferentes formas y colores, por lo que su carácter decorativo l hace que sea uno de los elementos más codiciados de los últimos meses en relación a elementos del hogar.
Su funcionamiento es muy simple: tan solo se ha de rellenar la lámpara con la fragancia deseada y prender con un mechero o cerilla durante 2 minutos su piedra superior. Pasados esos dos minutos tan solo hay que soplar la llama, y a partir de ese momento la lámpara empezará a trabajar desinfectando y aromatizando el ambiente.
Se trata además de un elemento seguro, ya que una vez apagada la llama, no se volverá a encender hasta que no se le vuelva a aplicar fuego, por lo que permanecerá aromatizando el ambiente sin riesgos.
Maison Berger tiene la fórmula secreta de la lámpara catalítica. Sus productos se pueden conseguir es diversos comercios, tales como Amazon o El Corte Inglés. En ambos se pueden comprar tanto la lámpara como distintas fragancias, para aromatizar el ambiente con nuestros olores preferidos.