Zaragoza
Las pymes de Aragón, que conforman más del 90% del tejido empresarial de la comunidad, están volviendo poco a poco a la normalidad en el día de hoy tras el apagón general de ayer, día 28 de abril.
Una jornada en al que se han visto afectadas por pérdidas de producción, retrasos en los envíos y daños en elementos eléctricos, entre otros impactos que ya se han detectado en las primeras valoraciones de las afecciones del apagón, que se siguen evaluando con el fin de conocer el alcance real de la situación vivida en las empresas por la falta de energía y comunicaciones.
Tras esta valoración, desde CEPYME Aragón se plantearán propuestas para paliar los daños, aunque ya se ha lanzado una primera petición que pasa por solicitar a las administraciones que valoren la puesta en marcha de una línea de ayudas específica que permita compensar el impacto directo en las empresas y con el fin de que se pueda restablecer la normalidad en el menor tiempo posible.
De este modo, se pretende así paliar también los efectos por la interrupción del suministro eléctrico con afecciones inmediatas en las cuentas de resultados de las pymes, especialmente en forma de pérdida de producción.
Además, la recuperación de la actividad, en función del subsector, no es inmediata dado que el reenganche de la producción supone para muchas industrias costes elevados de puesta en marcha, sobre todo en aquellos casos en los que se trabaja a turnos o se depende de procesos continuos. Son afecciones en las pymes a las que se suman también el lucro cesante derivado del parón forzoso, que desde CEPYME Aragón indican que se está analizando con detalle.
Desde la organización también han pedido esclarecer el origen del fallo con la mayor celeridad para garantizar que no se repita en el futuro una situación similar como el apagón general de ayer.