
Hace un año que Grupo Costa presentó su proyecto de Centro Logístico Agroalimentario del Valle del Ebro (CLAVE) en la localidad de Villamayor de Gállego en Zaragoza, con una inversión de 469 millones de euros, una superficie de 155 hectáreas y 3.200 puestos de trabajo. Y son cifras del DIGA que se han quedado obsoletas en estos 12 meses en los que la empresa aragonesa ha redimensionado el proyecto para incorporar un centro de transformación de rumiantes y dar una nueva dimensión a las zonas vinculadas con la industria biotecnológica.
Son cambios que elevan la superficie a 180 hectáreas, la inversión hasta los 896 millones de euros y la generación de empleo en 2.100 puestos de trabajo más, alcanzando la cifra de 5.300 en total, una vez esté finalizado y en funcionamiento todo este macrocomplejo logístico y agroalimentario del que se ha presentado el PIGA (Plan de Interés General de Aragón), que empieza a tramitarse hoy. De estos puestos de trabajo, el 40% serán perfiles técnicos y se crearán 4 empleos por cada millón de euros de facturación.
Una vez esté a pleno rendimiento, se prevé en un horizonte de 15 años, se calcula que se generará una facturación agregada de unos 1.700 millones de euros al año. Esto supondrá una aportación al PIB de Aragón de 1.080 millones de euros anuales, es decir, aumentará la riqueza de la comunidad en el 2,31%.
No obstante, el proyecto se acometerá en tres fases. La primera está prevista que arranque en el primer trimestre de 2027 para finalizar en 2029. En este período se llevará a cabo una inversión inicial de 175 millones de euros.
Esta parte del proyecto comprende la sede corporativa y el campus de biotecnología, así como el centro de producción avícola, un hotel y la electrogasolinera. Se calcula que se generarán 1.200 puestos de trabajo directos como mínimo, ha explicado Jorge Costa, CEO de Grupo Costa, durante la presentación de CLAVE, quien ha incidido en que solo en el centro avícola se empleará a 1.000 personas de forma directa a lo que habría que sumar todo el empleo que se genere.
El resto de las dos fases no tienen unos plazos concretos y se irán acometiendo según "el día a día. Nos gustaría ir rápido, pero las fases se pueden acelerar o ralentizar según vaya todo", ha incidido el directivo.
Porcino, avicultura y innovación y más
El proyecto CLAVE se distribuye en varias grandes áreas. Una de ellas es la destinada al porcino, que comprende 55.000 metros cuadrados en total y una generación de empleo de 1.200 puestos de trabajo. La capacidad es de 12.000 animales al día. Esta parte comprende un centro de transformación y procesado cárnico, así como una fábrica de proteínas y un centro logístico.
También se pondrá en marcha un centro de elaboración y envasado de productos frescos, cocidos y curados. En este caso, la superficie se cifra en 70.000 metros cuadrados, mientras que los empleos se elevan a 1.000 puestos de trabajo.
CLAVE igualmente comprende una zona avícola, para pollo y pavo, que contará con una extensión de 38.000 metros cuadrados y una generación de 1.000 puestos de trabajo. Aquí se levantará un centro de transformación y procesado y de logística, que se convertirá en la base de operaciones de Grupo Costa para el norte de España.
La logística es otro de los pilares de CLAVE. En este apartado, se dispondrá de 23.500 metros cuadrados para un gran almacén logístico de congelados y frescos, logística convencional y picking.
Por su parte, el área de rumiantes sumará una superficie de 32.000 metros cuadrados y unos 700 empleos. Grupo Costa instalará aquí un centro de transformación y procesado de carne de terneros y corderos.
La empresa aragonesa, que nació hace 60 años en Fraga, ubicará aquí su sede corporativa para lo que contará con 10.000 metros cuadrados. La previsión es superar los 200 puestos de trabajo. En este enclave se localizarán las oficinas y servicios generales, además de haber zonas de restauración, deportes, un hotel y una electrogasolinera, entre otras estancias.
El proyecto se complementa con una de las piezas estratégicas de CLAVE: el campus biotecnológico de vanguardia con 5.500 metros cuadrados para aulas y laboratorio y 5.500 metros cuadrados para industria biotecnológica. Estas instalaciones serán la sede de I+D+i de Grupo Costa y de la división de biotecnología.
Es un macroproyecto que incluye un total de 42 proyectos para contemplar todas las partes que se tienen que llevar a cabo como las conexiones viarias entre Villamayor y la A-2 -se harán de forma paralela dentro de la primera fase-, para conectar todas estas instalaciones, que también precisarán de energía. Para ello, CLAVE, que es el primer proyecto de suelo industrial certificado por BREEAM ES Urbanismo, contará con edificios de última generación y techos fotovoltaicos para abaratar el coste de la energía.
Los cambios del proyecto y el PIGA se han dado a conocer en una rueda de prensa en la sede de la Diputación General de Aragón. El presidente, Jorge Azcón, ha destacado la importancia de este proyecto que "va a ser referente en biotecnología y también para que otros proyectos se fijen en Zaragoza" y, en consecuencia, vengan a la comunidad aragonesa. "Es un proyecto que no solo va a transformar el sector, sino la economía. Es el proyecto más importante en el sector de la logística, biotecnología y agroalimentación que se desarrolla en España y, seguramente, en Europa".
Del cereal al mundo
Grupo Costa nació hace 60 años en la localidad de Fraga, en Huesca, para la compra-venta de cereal. Posteriormente, ha ido diversificando su actividad para adentrarse en otros sectores como el agroalimentario, las energías renovables, automoción, salud vegetal o el inmobiliario. Emplea a más de 5.000 personas y la facturación agregada ronda los 2.200 millones de euros.
Actualmente, su holding cárnico, Costa Food Group opera en más de 100 países con la integración de las marcas Piensos Costa, Costa Food Meat, Casademont, Ibéricos Costa, La Nuncia, Villar, Aviserrano, Roler, La Alegría Riojana y Juan Luna. Además, Costa Food Group supera las 800 granjas de porcino, la segunda ganadería más numerosa de Europa integrada en Piensos Costa.
Recientemente, adquirió también el centro Cárnicas de La Litera de San Esteban de Litera, en Huesca, al italiano Grupo Pini para potenciar su posición en el mercado europeo de cerdas.