
La CNMV ha remitido a la Audiencia Nacional un informe en el que alerta de posibles infracciones graves o muy graves en Grifols y advierte, además, de que "la propia entidad no ha sido consecuente con las afirmaciones que ha venido realizando en las contestaciones a los requerimientos" realizados. El envío del informe se ha producido a petición del juez José Luis Calama, que investiga a la firma de análisis Gotham City por lanzar presuntamente al mercado información engañosa sobre la empresa farmacéutica.
La CNMV elaboró en septiembre del año pasado dos informes, uno sobre Gotham, a cargo del Departamento de Mercados Secundarios, y otro sobre Grifols, que realizó el Departamento de Información Financiera y Corporativa (DIFC). El supervisor remitió el primero de ellos con las acusaciones contra Gotham, pero no ha sido hasta ahora, cuando a petición del juez, se ha visto obligada a enviar también el otro, en el que se reflejan las posibles irregularidades cometidas por Grifols.

El contenido
En el informe sobre Gotham, el supervisor de los mercados advierte de que la sugerencia realizada por esta firma de que Grifols vale cero "constituye un mensaje claramente engañoso", asegurando que su argumentario "es inexacto, poco profesional e imposible de justificar", negando que haya habido manipulación alguna.
No obstante, en el informe de Grifols, la CNMV sí que identifica numerosas deficiencias en las cuentas, acusa a la empresa de omitir información relevante y responsabiliza directamente, entre otros, a Raimon y a Víctor Grifols, dos de los miembros de la familia fundadora que ejercieron como consejeros ejecutivos durante el periodo investigado. De hecho, como conclusión final a la investigación, la Dirección General de Mercados propone al Comité Ejecutivo que "acuerde el inicio de un expediente sancionador" a la farmacéutica y que, en el supuesto de calificarse como grave o muy grave, se extienda la sanción a los "miembros de la comisión de auditoría y consejeros ejecutivos", como "responsables de la infracción".
El DIFC entiende que, además de la entidad, solo estos últimos tendrían la "mayor responsabilidad" en el hecho de que los informes financieros de Grifols "incluyeran datos inexactos o no veraces o que omitiera aspectos relevantes". Y, añade, que la farmacéutica habría omitido o no habría desglosado suficientemente la información financiera en relación, por ejemplo, a la consolidación de BPC Plasma y Haema, a aspectos relativos a operaciones con partes vinculadas o, al acuerdo de canje de las acciones con SRAAS. En cualquier caso, el DIFC exenta de cualquier responsabilidad al resto de consejeros al considerar "técnicos y complejos" los errores detectados.
"Las deficiencias encontradas por Gotham son distintas a las halladas por la CNMV"
Pese a que podría pensarse que los dos informes de la CNMV son contradictorios, la CNMV justifica que no es así. Primero, porque las deficiencias halladas por Gotham son "distintas" a las encontradas por el supervisor. Y, segundo, porque "algunas de las omisiones de información halladas por la CNMV y que estaban relacionadas con las acusaciones de Gotham no consistían en una falsedad informativa ni resultaban cifras incorrectas, sino que eran una omisión de información de desglose o explicativa en algunos estados financieros".