
El Ayuntamiento de Madrid ha modificado el protocolo de prestación ambiental sustitutoria de las sanciones en materia de limpieza de los espacios públicos y gestión de residuos para que los grafiteros tengan que encargarse de limpiar sus propias pintadas si quieren evitar el pago de multas.
El Consistorio ha informado en una nota de prensa de que los cambios, que fueron aprobados en Junta de Gobierno, entraron en vigor el pasado 4 de diciembre con el objetivo de "vincular directamente el servicio que realicen los grafiteros en beneficio de la comunidad con el motivo por el que fueron multados".
Hasta ahora, los grafiteros multados tenían que realizar tareas genéricas de limpieza, pero con los cambios serán los encargados de limpiar sus propias pintadas. De acuerdo con la información facilitada por el Ayuntamiento, colocarán una nueva capa de pintura siempre que la pintada hubiese tenido lugar "sobre materiales no porosos como ladrillo pintado, enfoscado y muros pintados".
Según ha explicado el Área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, a la hora de llevar a cabo esta limpieza "se protegerán las superficies que no vayan a ser objeto de pintado para evitar su ensuciamiento" y después se darán dos capas de pintura "por medio de rectángulos o cuadrados uniformes, buscando ajustar el tono de la pintura lo más aproximado a la original para evitar así la formación de contrastes visuales".
Para que lleven a cabo esta tarea se facilitará a los causantes de las pintadas "los equipos de protección individual (EPI) integrados por un par de guantes de trabajo con resistencia al corte (anticorte), botas reforzadas, chalecos azul reflectante serigrafiados con 'Limpio Madrid' y gorra", explica el Ayuntamiento.
Además, los días de lluvia se garantizarán "chubasqueros, pantalones impermeables y guantes adecuados para el agua".
6.000 solicitudes para evitar sanción desde 2016
De acuerdo con los datos del Ayuntamiento, desde 2016 han sido más de 6.000 las solicitudes para la realización de tareas sustitutivas de multas económicas. En lo que va de 2024 se han tramitado 361 expedientes sancionadores por pintadas.
El Ayuntamiento de Madrid ha recordado que en 2022 puso en funcionamiento el contrato de gestión del Servicio Público de Limpieza Urgente (SELUR) que, a su vez, desplegó las denominadas patrullas antigrafitis que no solo limpian las pintadas, ya que se encargan de revisar de forma periódicas "las zonas de los distritos donde su aparición es habitual".
Desde su puesta en marcha, según datos municipales, "se han prestado 146.108 servicios por parte de estas patrullas y la superficie total limpiada es de 2.419.951 metros cuadrados".