
Más publicidad institucional que nunca, pero sin transparencia alguna de hacia a donde va el dinero. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, oculta a que medios ha dirigido los casi 450 millones repartidos en publicidad institucional desde su llegada al Gobierno en 2018, lo que supone un incremento del 142% del presupuesto destinado a esta materia durante el mandato de Mariano Rajoy entre diciembre de 2011 y junio de 2018.
Sánchez había presupuestado este año el mayor reparto hecho nunca en publicidad con 162 campañas por un importe de 138,2 millones de euros, aunque es posible que la ejecución final sea bastante inferior, según explican fuentes del sector. Sea cual sea finalmente la cantidad final, son cifras que contrastan en cualquier caso con los repartos realizados por el Gobierno de Rajoy, que nunca superó el centenar de campañas publicitarias y que destinó un máximo de 37,7 millones anuales -ocurrió en el año 2015-, quedándose en varios ejercicios por debajo de los 20 millones de euros.
Sin transparencia
La gran pregunta que se plantea sin embargo en el sector es, ¿adónde va el dinero que reparte el Gobierno de Pedro Sánchez? Y no hay respuesta. Las sucesivas preguntas realizadas por este periódico acerca del reparto de la tarta publicitaria estatal al Portal de Transparencia se han quedado sin contestación alguna. El portal, dependiente del Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública, declina facilitar qué cantidad de dinero público se ha destinado a cada grupo editorial, cuánto invierten empresas como Loterías y Apuestas del Estado, Adif, Renfe, Turespaña o Correos, entre otras, y, sobre todo, en función de qué criterios. Moncloa, solamente, comparte la información relativa al presupuesto del que dispone cada ministerio, pero no su destino.
De acuerdo con los datos del Plan Anual de Publicidad Institucional, que elabora el ministerio de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, las carteras de Agricultura, Pesca y Alimentación, Igualdad y Transformación Digital y de la Función Pública fueron los que más inversión destinarán este año a la publicidad institucional con 21,5 millones, 17,5 millones y 13,6 millones de euros respectivamente. Entre los tres suman así en conjunto casi cuatro de cada diez euros repartidos. Si se tiene en cuenta, en cambio, el número de campañas realizadas, la palma se la lleva el ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico, que acapara el 26% del total con un importe de 9,5 millones de euros.
Según se explica en el plan anual, "la promoción de los derechos y deberes de los ciudadanos y la promoción de los hábitos saludables y seguros para la ciudadanía y el cuidado del entorno suponen el 86,76% de la inversión prevista para 2024". Entre las prioridades figuran también, no obstante, la promoción del turismo y la cultura, el apoyo al desarrollo de nuevas tecnologías, las campañas sobre la oferta de empleo público y el conocimiento por parte de la ciudadanía de las infraestructuras y medios de transporte.
Comunicación comercial
El Gobierno, además de la publicidad institucional, también invierte en campañas de carácter comercial –aquellas no están sujetas a la legislación –en la que se enmarcan precisamente la mayoría de las empresas estatales desde hace dos décadas. Este año se han llevado a cabo 57 campañas de este tipo de comunicación con una inversión que superaba los 131,7 millones, un 7,01% más respecto al año anterior.
En la publicidad comercial hay algo más de transparencia y las empresas sí que especifican cuánto dinero destinan o qué no a los medios a los que la contratan. El ministerio de Transportes es, en este sentido, el que invierte una mayor cantidad. Son en total 31,3 millones de euros, de los que cerca de 17 son de Renfe y alrededor de 14 millones corresponden a Aena. Otros 17,4 millones se corresponden con el ministerio de Industria y Turismo, siendo los principales anunciantes Turespaña, con 8,7 millones y Paradores con 3,7 millones.