En un establecimiento de Leroy Merlin en Fiumicino, Italia, se comenzó a notar la desaparición de varios productos, algo que llevó al gerente de la tienda poner una denuncia ante los Carabinieri. Las autoridades comenzaron una investigación por la que se halló una red de reventa de productos robados valorados casi en un millón de euros, destacando aparatos de aire acondicionado y calentadores de agua.
Lo más curioso es que los robos venían desde dentro y los principales sospechosos son dos empleados de 27 y 28 años, que se encargaban de la logística y de la seguridad de este Leroy Merlin. Ellos cogieron los bienes entre los años 2022 y 2023.
Además de los dos trabajadores, hay otras 20 personas que están siendo investigadas por haber sido cómplices de revender estos productos a precios reducidos. El valor de los artículos robados ascendió a 800.000 euros en 2022, aunque esta cifra bajó bastante en 2023.
Las autoridades italianas no descartan que la operación haya sido más extensa y buscan más sospechosos. El modus operandi era vender los productos robados a precios más atractivos, algo que les hacía que encontrasen rápidamente compradores.
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