
Los microplásticos son desde hace años parte de los océanos, muchos imperceptibles para el ojo humano. Una situación muy preocupante que no solo repercute en el medio ambiente, sino en la salud de los seres humanos a través de la cadena trófica. Durante los últimos meses han surgido diferentes estudios que señalan la existencia de dos tipos de estos contaminantes: los microplásticos (0,1 y 100 micras) y los nanoplásticos (0,001 y 0,1 micras).
La situación parece más problemática con el dato que señala que un litro de agua embotellada promedio puede contener unos 240.000 fragmentos de plástico detectables. Sin embargo, científicos de la la Universidad Médica de Guangzhou y la Universidad de Jinan en China han descubierto un sencillo truco que puede llegar a eliminar hasta un 90% de estos residuos que consumimos en el agua. Se trata de un método que funciona tanto en aguas de mineralización débil como aguas más duras, como las del grifo, y para ello se puede hacer utilizando lo que hay en cualquier cocina normal.
Un proceso de ebullición y filtrado que puede ser muy beneficioso, aunque su eficacia puede variar dependiendo del tipo de agua. "Esta sencilla estrategia de hervir el agua puede 'descontaminar' los NMP del agua del grifo de los hogares y tiene el potencial de aliviar de forma inofensiva la ingesta humana de NMP a través del consumo de agua", explica la investigación realizada en febrero de este año.
En el caso del agua más dura, principalmente de grifo, el resultado obtenido se pudo notar más ya que al calentar el agua la cal (o carbonato de calcio) se acumula adhiriéndose los fragmentos de microplásticos en una costra.

En el agua débil, con una menor concentración de cal, se consiguió eliminar una cuarta parte de estos NMP. Los investigadores aseguran que los residuos generados se pueden quitar fácilmente con una malla de acero, como la que se utiliza para colar el té. "Beber agua hervida es aparentemente una estrategia viable a largo plazo para reducir la exposición global a los NMP. Sin embargo, beber agua hervida suele considerarse una tradición local y sólo prevalece en unas pocas regiones", explican en el estudio de Environmental Science & Technology Letters.
"Nuestros resultados han ratificado una estrategia altamente factible para reducir la exposición humana a NMP y han establecido la base para futuras investigaciones con un número mucho mayor de muestras".