
Al buscar la palabra 'doula' en Google surgen tres tipos de resultados: su significado en la RAE, los pasos para entrar en el negocio de las doulas y las denuncias sanitarias que existen por supuesto "intrusismo" profesional. Hablamos de un servicio de compañía, mayoritariamente realizado por mujeres, que se encarga de dar consejos a personas que se encuentran en un proceso clave como puede ser un parto o un próximo fallecimiento.
Según la documentación histórica, el término doula surge en la Antigua Grecia. Se empleaba para referirse a las esclavas o sirvientas que probablemente ayudaban a la mujer de la casa durante el parto.
En 1980 el concepto tomó fuerza gracias a un estudio de médicos que lo usó para definir a las mujeres que acompañaban en procesos de parto en Guatemala y cuya labor ayudó a "minimizar el número de cesáreas", según revela la investigación publicada en The New England Journal of Medicine.
A partir de ese momento, la práctica neonatal, no científica, tomó fuerza hasta hoy, aunque aún carece de una legislación y regulación, lo que ha generado fuertes polémicas en países como España, donde se le acusa de "intrusismo profesional" por parte del Consejo General de Enfermería y La Asociación Española de Matronas.
"A diferencia de la profesión de matrona, que está regulada por la Comunidad Europea desde 1985, la actividad de la doula no está regulada y está vulnerando las competencias de las matronas", afirmó a la BBC el expresidente del Consejo General de Enfermería (CGE), Máximo González Jurado.
"Intrusismo profesional"
En esta línea, el 76% de las matronas en España afirma conocer casos reales de "intrusismo profesional". Sin embargo, tan solo el 5% ha tramitado una denuncia ante esta situación por las barreras y complicaciones que encuentran al hacerlo "por las barreras y complicaciones que encuentran al hacerlo, con un arduo proceso de tramitación", según reveló un estudio del CGE.
Además, el 84% de las matronas en España manifiestan que en su comunidad autónoma no están desarrolladas todas las competencias para las que están formadas. "El déficit de matronas (enfermeras especialistas en Obstetricia y Ginecología) en España, situado entre el 40-50%, el escaso relevo generacional o el lento desarrollo de competencias está poniendo en riesgo la salud de madres, familias y recién nacidos en nuestro país", señalan desde el CGE.
Según la entidad de enfermería española, la falta de matronas está provocando el intrusismo en la profesión de otros profesionales sanitarios, así como de otros agentes no profesionales, sin formación sanitaria reglada como es el caso de las doulas y de profesionales de otros ámbitos que entran en actividades propias del marco competencial de las matronas.
"El problema de base es que somos pocas matronas. Debemos combatir el intrusismo general, pero lo que no podemos tolerar, ni la sociedad ni las instituciones, ni las matronas es el intrusismo de las llamadas doulas, que no cuentan con ninguna capacitación formativa más allá de pequeños talleres o cursos. Su práctica puede poner en riesgo la salud de mujeres y recién nacidos, por ello debemos poner límites y trabajar más en equipo", señaló de la mano del documento del CGE, Noelia Rodríguez, vocal matrona del Colegio de Enfermería de Alicante.
Concepto en la RAE y la figura de las doulas en España
Ha sido tal el revuelo de la figura de las doulas, que las propias enfermeras españolas comenzaron una campaña después de comprobar que la Real Academia Española (RAE), en su actualización 23.7 de su Diccionario de la Lengua Española, define a la doula como "una persona capacitada para prestar asistencia durante el embarazo", un término que denuncian que es "completamente erróneo ya que las doulas no son profesionales sanitarias", por lo que piden al área que modifique con urgencia esta definición, según una publicación de Diario Sanitario.
La figura de la práctica de las llamadas doulas estuvo contemplada en la Estrategia de atención al parto normal en el Sistema Nacional de Salud, realizada por el Ministerio de Sanidad de España en 2007. Sin embargo, en 2015 se eliminó el término que se encontraba en el apartado número 3 del documento oficial, en la descripción del "Acompañamiento durante el proceso". Según palabras del exministro de Sanidad, Alfonso Alonso, la decisión se tomó para "aclarar que no tenían intención de crear una nueva categoría profesional".
Crecimiento del negocio de las guardianas del parto y fallecimiento
En nuestro país es tal el crecimiento de esta práctica que incluso cuentan con la representación: la Asociación Española de Doulas (AED), que tiene un estatuto, un "código ético" y donde realizan "formaciones" de la práctica. Sin embargo, el impacto no sólo ocurre en España. La figura de las doulas es cada vez más conocida en varios países, y existen organismos nacionales y supranacionales como la Red Mundial de Doulas y la Red Circular de Doulas.
En Estados Unidos, por ejemplo, el negocio de las doulas ha visto un aumento dramático. Según los datos de la Oficina del Censo de los Estados Unidos de 2018, las asistencias de doulas en nacimientos fue en promedio de tres veces más de lo que ocurría en 2005.
El negocio de las también llamadas "guardianas" del parto y de los fallecimientos tiene varias guías que se pueden encontrar en internet. "Cómo iniciar un negocio de doula: 12 pasos para el éxito", reza un tutorial para empezar este tipo de trabajos. Los cargos de servicio de una doula varía según su experiencia y ubicación. En Estados Unidos los precios oscilan entre 500 y 2.000 dólares, (465 y 1.860 euros al cambio, respectivamente). La AED señala que la media que cobra una doula por cinco semanas de asistencia y guardia de una embarazada y su parto es de 500 a 700 euros.
Las doulas de la muerte
Al igual que existen duolas del proceso neonatal, existen las que entregan compañía y consejos a personas próximas a morir. "La esencia del cuidado de una doula (de la muerte) es brindar apoyo y orientación sin prejuicios a personas y familias en momentos de cambios de vida críticos y transformadores", según cuenta a Fortune la National End of Life Doula Alliance (NEDA).
Según la entidad, la función de una duola de la muerte complementa la de otros servicios, como los decuidados paliativos, con apoyo físico, emocional, espiritual y práctico. Eso puede incluir tomar la mano de alguien o escuchar mientras el paciente recuerda, o simplemente ser una presencia calmante durante el proceso de muerte.