Una de las imágenes habituales del sorteo de la Lotería de Navidad es la de las tablas apiladas una vez se han sacado todas las bolas de los bombos y los premios ya han sido repartidos.

Se trata de un elemento definido por el diccionario de la Real Academia Española, que en su acepción 19 califica la tabla como un "expositor o tablero en que se muestran las bolas de los números premiados y las de sus correspondientes premios".

Y ese es, precisamente, el cometido de la tabla en la Lotería de Navidad: mostrar cuáles son los números que han sido premiados, es decir, las bolas sacadas del bombo junto a su respectivo premio.

En el sorteo de Lotería de Navidad hay un total de 10 tablas, cada una de ella provista de 10 alambres. Los niños de San Ildefonso van colocando las bolas en los alambres, que se dividen en dos: un espacio para el número y otro para el premio. En cada tabla caben 400 bolas, 200 de números y 200 de premios.

Las tablas son comprobadas por miembros del personal de Sociedad Española de Loterías y Apuestas del Estado tras la finalización del sorteo, a fin de elaborar la lista definitiva de premios que se manda a las administraciones y medios de comunicación.

Tal y como informa Loterías en su dossier del sorteo de Navidad, "las tablas de los números premiados quedan expuestas al público durante siete días en la sede de Loterías". Esta sede se encuentra en la calle del Poeta Joan Maragall, número 38, en el barrio madrileño de Tetuán.