Así cambiará la estación de Chamartín a partir de 2026

La estación de Madrid-Chamartín Clara Campoamor se encuentra en el proceso de obra para convertirse en uno de los puntos clave de Cercanías Madrid y del transporte urbano y metropolitano, con una inversión que roza el millón de euros, por lo que la transformación será notable para todos los usuarios.

De hecho, en la fase actual de las obras, se ha interrumpido el servicio ferroviario entre Chamartín y Nuevos Ministerios, en el túnel de Sol, en las líneas C3, C3a, C4, C4a y C4b), desde el 4 de febrero y hasta el próximo mes de diciembre de 2023, aunque se dispone de alternativas en otras líneas de Cercanías.

¿Cómo quedará la nueva estación de Chamartín?

En esta fase, que se encuentra ahora mismo en proceso, se espera la ampliación del vestíbulo principal hacia el norte, así como el montaje de aparatos de vía y la señalización entre las vías 1 y 6. También se está haciendo el acondicionamiento de los andenes 1, 2 y 3, mientras se refuerzan las estructuras en el ámbito de la plaza urbana.

Desde Adif, indican que esta remodelación total de la estación de Madrid-Chamartín Clara Campoamor la convertirá en "un referente de la movilidad sostenible, multimodal, conectada e integrada con el proyecto Chamartín Ecosistema Abierto".

En concreto, destacan en esta propuesta tres elementos arquitectónicos clave:

• Las terrazas del parque, que surgen como extensión natural del futuro Parque Central.
• La recuperación de las bóvedas del sector sur.
• Las torres, incluyendo tres edificios de altura de 110, 160 y 220 metros, así como la nueva sede de Adif, que acogerán al desarrollo del entorno y el centro de negocios.

La reforma se está haciendo en base a elementos de sostenibilidad, destacando el uso de materiales naturales y reciclados; la circularidad para conseguir un ciclo cerrado de la huella de carbono; el consumo y gestión responsable del agua, mediante soluciones inteligentes y la recuperación del agua de lluvia; y la generación y aprovechamiento de energía mediante captadores solares fotovoltaicos sobre la mayor parte de la superficie cubierta.

Habrá dos terminales polivalentes, que podrán ser usadas con flexibilidad. Una de ellas para salidas y otra para llegada de viajeros. De hecho, destaca la terminal norte, que cuenta con casi 35.500 metros cuadrados de nueva construcción, que incluye un truncamiento que agilizará el acceso directo a los andenes de Cercanías y a los recorridos de los viajeros que efectúen la salida o llegada en trenes de larga distancia, procedentes o con destino Cercanías.

Del mismo modo, se facilitarán los intercambios con metro y taxi, además de los accesos peatonales, y el futuro intercambiador de autobuses que se desarrollará en Agustín de Foxá, tal y como se recoge en la nota de prensa de Adif.

Por otro lado, la nueva estación de Chamartín incorpora espacios para medios de transporte sostenibles (compartidos y privados), incluyendo áreas de paquetería para el reparto mediante vehículos de cero emisiones y puntos de recarga para vehículos eléctricos.

Por último, se indica que la solución comercial se basa en un modelo All in Hall, óptima para una estación de gran volumen, con coexistencia de servicios de Cercanías y larga distancia. La configuración de los bloques comerciales de la terminal norte, como una plaza pública, se ve reforzada con un pasillo y elementos de conexión con el parque y la ciudad, intensificando la funcionalidad ferroviaria de la terminal sur.

Alrededor de 180.000 metros cuadrados ocuparán las tres torres, lo que permite una gestión patrimonial independiente del resto del complejo. Las oficinas se conciben como espacios flexibles e iluminación natural.

A esta fase se suman otras actuaciones para duplicar la capacidad de la alta velocidad y el vestíbulo de viajeros de la estación, maximizar las vías y andenes destinados a Cercanías y la red de media y larga distancia.

Así, habrá más vías destinadas a alta velocidad, que pasarán de 6 a 12, una vez concluya la construcción de cuatro nuevas vías pasantes y la conversión a ancho estándar de otras dos. La superficie del vestíbulo también se duplica y se recupera el antiguo vestíbulo de Cercanías bajo vías de la cabecera norte y, con él, los núcleos de comunicación vertical entre andenes y el vestíbulo, además de la conexión con Metro.