
Un informe de la Consejería de Empresa y Trabajo de la Generalitat condiciona la modificación del plan director urbanístico (PDU) que debe permitir construir el proyecto de Hard Rock en Vila-seca y Salou (Tarragona) a que Ercros implemente cambios en su planta en la localidad.
Así se desprende del documento, consultado por Europa Press, que ha hecho público la plataforma Aturem Hard Rock este miércoles, ha explicado en un comunicado.
Fuentes de la Generalitat han verificado la validez del informe y han destacado que es técnico y que no entra en condicionamientos políticos.
El informe destaca que hay dos parcelas del PDU donde está previsto ubicar elementos "muy vulnerables" -usos hoteleros, comerciales u ocio- dentro del límite de seguridad por proximidad a la industria petroquímica.
Entre las mejoras que debe hacer la empresa está la consolidación de la capacidad productiva de cloro-sosa con la construcción de nuevas instalaciones para la producción de ácido triclorisocianúrico y de hipoclorito cálcico, y deberá actualizar y ejecutar cambios asociados a tres expedientes.
También debe reducir la potencial afectación exterior a las actividades en seguridad industrial con el confinamiento de los tanques de almacenamiento de cloro y la estación de carga de las cisternas de cloro, una nueva torre de seguridad de absorción de cloro y cortinas adicionales de abatimiento de cloro, entre otros.
Ercros ha declarado este miércoles a Europa Press que estas actuaciones son "algunos de los varios proyectos" previstos y que están pendientes de la aprobación de las administraciones públicas.
"Es voluntad de Ercros emprender los proyectos referidos en el plazo que técnicamente sea posible", ha añadido la compañía.
Cinco años de retraso
Los trámites ambientales y urbanísticos llevan postergando más de cinco años el proyecto de Hard Rock en Tarragona, que fue adjudicado por la Generalitat en mayo de 2018.
De hecho, su desbloqueo formaba parte del acuerdo entre ERC y PSC para aprobar los Presupuestos de la Generalitat de 2023, pero los plazos se han vuelto a incumplir.
El compromiso rubricado este 1 de febrero entre el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y el líder del PSC, Salvador Illa, recogía que este 2023 se deberán completar los procesos relacionados con el inicio del proyecto del Consorcio Recreativo y Turístico de Salou y Vila-seca -espacio donde está previsto que se ubique el complejo-, previa aprobación definitiva del Plan de Desarrollo Urbanístico, durante el primer semestre de 2023. Este paso no se ha dado todavía, y no hay fecha prevista.
También se debe mantener la disponibilidad de los terrenos -propiedad de La Caixa y en cuya compraventa la Generalitat actuará como intermediario, con una valoración de 120 millones- como paso previo a la evolución del proyecto.
Los planes de la multinacional estadounidense contemplan la construcción de un gran hotel con casino, un espacio para acoger eventos de hasta 15.000 espectadores, y alianzas con Value Retail y PortAventura para añadir un área comercial y un hotel para público familiar. La inversión total proyectada es de 2.000 millones de euros, con una primera fase de 700 millones y un impacto económico local de unos 1.300 millones.
De hecho, el proyecto de Hard Rock surgió de la iniciativa fallida del empresario Enrique Bañuelos para levantar el complejo de turismo y juego Bcn World en los mismos terrenos, con hasta seis casinos, y que fue presentada en el Palau de la Generalitat en 2012, pero que con el tiempo se fue recortando.