Madrid
A mediados de abril dio comienzo el proyecto del Ayuntamiento de Madrid conocido como Calle 30 Natura. Su nombre se debe al objetivo de cubrir los muros de la M-30 con unos jardines verticales. Actualmente, los que son los jardines verticales más grandes de Europa ya cubren los muros en la Avenida de la Ilustración.
Se trata de una iniciativa con la que el Gobierno madrileño busca 'renaturalizar' la conocida circunvalación, que alberga un tráfico diario aproximado de un millón de vehículos. De acuerdo con la página web del Ayuntamiento de Madrid, estos jardines verticales ya están instalados.
La transformación de la M-30
Se han escogido plantas que consumen poca agua, resistentes y adecuadas a las condiciones del entorno. No solo mejorarán la imagen (antes gris o llena de grafitis) pasando del hormigón al color verde, sino que forman parte del plan del Ayuntamiento para reducir las emisiones y mejorar la calidad del aire de Madrid.
Otra de las ventajas de esta transformación es que ya no será necesario luchar contra los actos vandálicos que llenaban de pintadas estos muros. El Consistorio se vio obligado incluso a formar patrullas 'antigrafitis', y gracias a Calle 30 Natura ya no serán necesarias.
Volviendo a las pantallas cubiertas de vegetación, las mismas cuentan con un sistema de riego automático, y con otro que monitoriza a tiempo real las condiciones de los jardines. Esto sirve para mantener la vegetación (y los muros general) en un estado óptimo.
La estrategia Madrid 360
El proyecto Calle 30 Natura forma parte de Madrid 360, una estrategia de sostenibilidad ambiental que quiere que el crecimiento de la capital de España vaya de la mano con una mejoría de la calidad del aire. Se espera que este proyecto amortigüe la isla de calor de la ciudad, y que reduzca también la contaminación acústica propia de la M-30.
El pasado enero, tuvo lugar en un tramo de 400 metros (entre las glorietas de Mariano Salvador Maella y de Nueva Zelanda) una prueba piloto con el primer enclave seleccionado en la fase inicial del proyecto. El presupuesto para ello fue de 3,8 millones de euros.
El Ayuntamiento de Madrid quiere cubrir con plantas un total de 100.000 metros cuadrados para 2024. Además, se espera que sea en los comienzos de dicho año cuando comience la segunda fase del proyecto.