Madrid
El ingeniero electrónico e inventor estadounidense, Steve Wozniak, fundó el gigante tecnológico Apple Inc. en 1976 junto a Steve Jobs y a Ronald Wayne. Recientemente hizo unas declaraciones en las que expresaba su desconfianza en ChatGPT. Sobre la popularidad de este robot de conversación movido por Inteligencia Artificial (IA) admitía, sin embargo, que se trata de algo "bastante impresionante" y "útil para los seres humanos".
Pero no quiso terminar ahí con su opinión: "El problema es que aunque pueda hacer buenas cosas para nosotros, también es capaz de cometer errores terribles al no saber qué es la humanidad", comentaba Wozniak.
Para explicar esto lo compara con los vehículos de conducción autónoma, por los que siente el mismo grado de escepticismo. Y es que para él, la IA no es actualmente capaz de sustituir al conductor humano. "Es como cuando conduces tu coche, y sabes lo que pueden estar a punto de hacer otros conductores a tu alrededor, porque son humanos igual que tú", explicaba.
Lo positivo de ChatGPT
Sí es cierto que ChatGPT lleva demostrando desde su lanzamiento que es capaz de realizar tareas que llevan un tiempo para las personas. Algunos ejemplos son escribir guiones de películas, artículos periodísticos o incluso sobre investigaciones. Además, las respuestas que ofrece a las muy variadas preguntas de los más curiosos van desde solventar problemas matemáticos, hasta consejos de crianza, pasando por organización de fiestas.
Además, en tan solo 2 meses la plataforma de IA ha registrado 100 millones de usuarios. Comparado con TikTok, esta red social tardó 9 meses (4,5 veces más) en alcanzar dicha cifra. Tal éxito demuestra su enorme potencial para asistir a un trabajador humano.
Pero Wozniak asegura que, a pesar de que la herramienta no conoce el significado de "humanidad" ni de "emociones y sentimientos sobre sujetos", esta puede ayudar en numerosos ámbitos en su nivel de desarrollo actual, tales como explicar el lenguaje de programación a quien no sepa utilizarlo.
La flaqueza de ChatGPT
Prosigue comentando el problema de que esta IA no es tan impresionante con tareas que requieren de creatividad. Por ejemplo, CNBC Make It le pidió al robot que escribiese una publicación para blog financiero, sobre recolección de pérdidas fiscales. Los resultados indicaban que, para poder seguir los consejos de ChatGPT, era necesario tener una gran cantidad de contexto adicional, y que la IA no aportaba. Incluso algunos usuarios han puesto en duda su fiabilidad, comentando que erra a la hora de resolver problemas lógicos o matemáticos simples.
Las IA competidoras, por su parte, sufren de carencias similares, respaldando los argumentos de Wozniak. Por ejemplo Alphabet, la sociedad controlante de Google, perdió 100.000 millones de dólares en participación en el mercado tras el conocimiento público de que el robot de conversación movido por IA de la compañía, Bard, había cometido un importante error de precisión durante uno de sus primeros anuncios.
Y es que esta inteligencia afirmaba que el Telescopio Espacial James Webb fue el primero en fotografiar planetas fuera del Sistema Solar. De acuerdo con la web de la NASA, sin embargo, el primero en lograr dicha hazaña fue el telescopio del Observatorio Europeo Astral, en 2004.
