
El fundador de Microsoft afirmó este martes que la pandemia del covid-19 "podría haber sido mucho peor", ya que la tasa de mortalidad ha sido de solo el 0,2%. Bill Gates aprovechó la ocasión para plantear la creación de un equipo global compuesto de 3.000 expertos que ayuden a prevenir la próxima epidemia, que podría estar a la vuelta de la esquina, según el filántropo.
"La probabilidad de que en los próximos 20 años haya una nueva pandemia, de origen natural o intencionada, yo diría que es del 50%", dijo Gates durante una entrevista con la revista Time. La conversación fue a propósito de la publicación de su nuevo libro: Cómo evitar la próxima pandemia.
Las cifras de mortalidad a la que se refirió el empresario se basan en aproximaciones sobre número real de víctimas del virus. Si el conteo oficial es de 6,3 millones, cálculos como el de The Economist apuntan a cifras muy superiores, de entre 15,2 millones y 25,5 millones.
"Tengo que decir que, teniendo en cuenta el balance de esta pandemia, 20 millones de muertos en todo el mundo y un millón en Estados Unidos, podría haber sido mucho peor. Tuvimos suerte de que la tasa de mortalidad fuera del 0,2%".
Gates reconoció que, pese a la tragedia que ha supuesto la covid-19, una futura epidemia podría ser una catástrofe simplemente con que tuviese una mortalidad algo superior, ya que el número de víctimas ascendería de manera exponencial. Si se repite la capacidad de transmisión, pero se incrementa la tasa de mortalidad al 5%, "podría ser el fin de la sociedad".
El equipo de Respuesta y Movilización Global de Pandemias, como bautizó el filántropo al grupo de investigadores que protegería al mundo de esta amenaza, estaría coordinado por la Organización Mundial de la Salud y uno de sus deberes sería realizar simulacros a gran escala para preparar la respuesta de cada país a este posible escenario.
La inversión anual en estos expertos sería de unos 1.000 millones de dólares, estima Gates, un coste ínfimo en comparación con las pérdidas relacionadas con la pandemia y las vidas que podrían salvarse. "Hasta ahora hemos perdido 14 billones de dólares con la pandemia".
"No se puede hacer mucho si no se actúa con rapidez", explicó el directivo. "Las pandemias son un problema global, y si un país no cumple con su obligación de detectar y contener, pasa a ser un problema para el resto de países".