
El autoempleo se ha convertido en la opción elegida por miles de personas por culpa de la difícil situación en la que se encuentra el mercado laboral. Aquellas personas que no pueden acceder a un empleo por cuenta ajena recurren a un trabajo como autónomo.
Sin embargo, estas personas muchas veces emprenden con más ilusión que experiencia, por lo que cometen grandes errores a la hora de poner en marcha su negocio. En concreto, los mayores problemas aparecen a la hora de llevar las cuentas del negocio y controlar las finanzas.
No obstante, hay un error que se repite frecuentemente y que puede costar la vida de la empresa: la cuenta profesional. Este problema es más habitual de lo que puede parecer y genera infinidad de problemas.
Este es el error que no debes cometer en tu negocio
Uno de los errores que no deben cometer nunca los autónomos es no tener la cuenta personal y la cuenta profesional separadas. En muchas ocasiones, los trabajadores por cuenta propia más novatos ponen en marcha su negocio, y dependen única y exclusivamente de la cuenta en la que habitualmente ingresaban las nóminas de su empleo por cuenta ajena.
Esa situación pone en jaque al autónomo, que puede generan grandes problemas. En primer lugar, como es obvio, el profesional no podrá llevar unas cuentas sensatas del negocio, ya que tendrá combinado el patrimonio personal con la liquidez de la empresa. Esto podría llevar a grandes descuadres en el negocio.
En segundo lugar, algunos autónomos tienen que responder a las deudas del negocio con la liquidez de la propia empresa, por lo que combinar ambas cuentas puede suponer un gran problema, ya que ambos patrimonios estarán combinados.
Además, El trabajador puede gastar más de lo que debería, ya que al no separar una cuenta de la otra podría caer en la tentación de utilizar ese dinero para compras de carácter personal.
Por último, a la hora de llevar a cabo un posible proceso de cese de actividad, de nuevo, esto podría suponer un problema, ya que será más difícil demostrar que el negocio se encuentra en una mala situación.