
Adiós a la fábrica de envases para el sector hortofrutícola en Valencia de Obeikan, un grupo inversor de Arabia Saudí que decidió instalarse en la localidad de Canet d'en Berenguer en 2007 para situarse en el núcleo de la huerta valenciana productora de cítricos, caquis y otros productos agrícolas.
La empresa Obeikan MDF España ha comunicado su decisión de cerrar la factoría ubicada muy cerca de Sagunto. La dirección de la filial española así lo ha trasladado formalmente a la representación legal. Según ha informado el sindicato CCOO, la intención de la compañía iniciar un procedimiento de despido colectivo (ERE) par ala plantilla junto con el cierre patronal de su centro de trabajo.
Para abordar el final de su actividad, la filial del grupo árabe ha emplazado al comité de empresa a una primera reunión el próximo 23 de junio. Una drástica medida que se produce después de que la filial española haya recortado ventas desde la pandemia con una fuerte caída de su rentabilidad. De hecho, en los ejercicios 2022 y 2023 la filial española sumó pérdidas de más de 7 millones de euros.
Según las últimas cuentas en el registro, del año 2023, su plantilla al cierre del ejercicio se situaba en 112 personas. La compañía de envases había llegado a alcanzar los 175 trabajadores antes de que su actividad se redujese.
Además, el grupo árabe llegó a anunciar una inversión en una nueva planta en Alzira de 140 millones de euros en 2013, que nunca se llegó a materializar y en la que había previsto otros 200 empleos.
La tecnología
La planta valenciana estaba especializada en envases de MDF, un material compuesto por fibras de madera, resinas y ceras prensadas, utilizado en formas de cajas y que además con la tecnología de Obeikan permitía todo tipo de formatos impresos. Además de los propios productores valencianos, entre sus clientes llegó a contar con gigantes europeos de la distribución como la británica Tesco y la alemana Metro.
Precisamente la multinacional saudí, que está presente en 16 países, nació como una empresa de impresión y posteriormente dio el salto a otros sectores, como el vidrio, los embalajes, la educación, el inmobiliario o la inversión digital.
Desde CCOO se lamenta que la única salida que plantee la dirección de la empresa sea el cierre de la actividad, una situación que atribuye a una gestión empresarial deficiente que ha desembocado en este grave desenlace. "Esta situación no es responsabilidad de la plantilla, que ha demostrado compromiso y profesionalidad a lo largo de los años", asegura en un comunicado.
El sindicato explica que participará en la negociación del ERE con responsabilidad y firmeza, exigiendo transparencia, respeto y medidas que minimicen el impacto sobre las personas trabajadoras. No vamos a permitir que se trasladen las consecuencias de una mala dirección empresarial a quienes han sostenido la actividad con su trabajo diario.
Asimismo, el sindicato insta a las administraciones públicas competentes a implicarse activamente en este proceso y a actuar con rapidez para preservar el empleo y el tejido industrial de la comarca del Camp de Morvedre. El ERE se suma a otros expedientes de salida de trabajadores en el área industrial de Sagunto, como el que tramita Fertiberia, que está viviendo estos días protestas y huelgas.