La falta de rentabilidad de las franquicias de DIA ha provocado que la banca les haya cerrado casi por completo el grifo de la financiación, obligando a la empresa a tener que darles crédito para mantener el ritmo de aperturas previsto. El problema se agrava porque, en los últimos años, las entidades financieras están ejecutando gran parte de los avales otorgados a los franquiciados para la apertura de establecimientos, lo que ha dejado a muchos de ellos en la ruina, según denuncia Asafras, la asociación que defiende sus intereses y que ha presentado una denuncia contra DIA ante Bruselas y otra a la CNMC.
Copyright 2006-2018, Editorial Ecoprensa, S.A. | Política de Privacidad | Aviso Legal | Política de cookies | Cloud Hosting en Acens |
Gestión de consentimiento de cookies