
Wall Street cae pero suaviza las pérdidas hacia el cierre de sesión en los principales índices de Estados Unidos. Lo que las palabras de Yellen no pudieron hacer lo hizo este jueves un rumor que recorrió los parqués norteamericanos como la pólvora: el cierre del grifo de la OPEP ha provocado una inmediata reacción en los parqués al otro lado del Atlántico, que han girado su cotización al alza recortando drásticamente las pérdidas de la sesión.
Así, el Dow Jones, su principal indicador, bajó un 1,60%, hasta los 15.660 puntos, después de perder más de 250 enteros en medio de una oleada de ventas en las principales bolsas mundiales. Por su parte, el selectivo S&P 500 bajó un 1,23%, hasta los 1.829 enteros, y el índice compuesto del mercado Nasdaq cedió un 0,39%, hasta 4.267 unidades.
Las cesiones habilitaron que el futuro del mini Nasdaq 100 formara una nueva onda de caída, que podría encajar con un ciclo completo de cinco ondas en el último gran movimiento bajista de las últimas semanas. Si esto es así un rebote podría estar muy próximo aunque el riesgo que seguimos viendo a corto plazo es que aún podamos ver una profundización de las caídas hasta soportes fundamentales de medio plazo como son los 3.790/3.840 del Nasdaq 100 o los 15.000 puntos del Dow Jones Industrial, tal y como mostramos en el chart adjunto.
Una caída hasta esos soportes la veríamos como vulnerable y desde ahí entendemos que es altamente probable que asistamos a una reacción alcista importante en próximos meses que operativamente vamos a intentar aprovechar dado que oportunidades como estas no suelen ser muy habituales.
La OPEP podría cerrar el grifo
El ministro de energía de Emiratos Árabes Unidos ha asegurado que la OPEP podría cooperar para minorar la sobreproducción de petróleo y estabilizar así los precios del crudo, según recoge The Wall Street Journal.
El ministro de energía ha señalado que existe un posible acuerdo entre los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) para recortar la producción. Asegura estar preparada para cooperar en los niveles de producción de petróleo, lo que, según estiman, serviría para ajustar los precios del "oro negro" este mismo año.
Además, los rumores han provocado, como no podía ser de otra manera, que los dos principales barriles de crudo pasaran de experimentar fuertes pérdidas, incluso tocando mínimos de 13 años el West Texas, a mantenerse sin cambios durante la sesión.
En torno a las 20:30 hora española, el barril estadounidense cotizaba en los 26,05 dólares, un precio que no se veía desde el año 2003. El Brent también caía con fuerza, perdiendo a esa hora los 30 dólares. Sin embargo, las declaraciones del ministro de Energía de Emiratos Árabes Unidos generó un rápido avance en el precio de ambos barriles: el europeo llegó a superar los 31 dólares, con un avance cercano al 1%, y el West Texas estadounidense se acercó al entorno de los 27,5 dólares en los que arrancó la sesión. El volumen de negociación durante la jornada fue más del doble que la media de los últimos 100 días.
Hasta el momento en el que se dieron la vuelta, los dos barriles experimentaban caídas destacables, debido, según Bloomberg, a que el principal almacén de crudo de Estados Unidos 'Cushing, Oklahoma' está acercándose a su límite: la semana pasada aumentó su nivel en 523.000 barriles, hasta los 64,7 millones. El tope se mantiene en los 73 millones de barriles, con lo que no queda mucho margen.
Aunque medios como la CNBC o Bloomberg ya se hacen eco de la noticia adelantada por el WSJ nada ha sido confirmado de manera oficial desde la OPEP.
La sesión:
La atención de los inversores estuvo en una nueva comparecencia en el Congreso de la presidenta de la Reserva Federal, Janet Yellen, en la que admitió que los tipos de interés negativos no están "fuera de la mesa" si la economía sufre un abrupto frenazo.
Los inversores también estuvieron pendientes de la cotización del petróleo, que volvió a desplomarse y en el caso del barril de Texas cerró en un nuevo mínimo anual de 26,21 dólares, tras caer durante la jornada un contundente 4,52%.
Todos los sectores en Wall Street terminaron en números rojos, entre los que destacaron el financiero (-2,63%), el industrial (-1,60%), el de materias primas (-1,18%), el energético (-0,83%) o el tecnológico (-0,15%).
La inmensa mayoría de valores del Dow Jones cerraron en negativo, encabezados por Beeing, que cayó un 6,80 % tras publicarse que está siendo investigado por la SEC por las prácticas contables en los registros de ventas y costes de dos modelos de la aeronáutica.
También bajaron los bancos JPMorgan (-4,50%) y Goldman Sachs (-4,44%), los grupos industriales General Electric (-3,00%) y United Technologies (-2,64%), la firma deportiva Nike (-2,49%) o las financieras Visa (-2,39%) y American Express (-2,26%).
La otra cara de la moneda la protagonizó la tecnológica Cisco Systems, cuyas acciones se dispararon un 9,64% tras sorprender la víspera con sus resultados trimestrales, además de Walt Disney (1,59%) y Exxon Mobil (0,30%).
Fuera de ese índice, las acciones del grupo Pandora se dispararon un 8,45% tras publicarse que está buscando posibles compradores, aunque en las operaciones electrónicas caía con fuerza un 6,37% al decepcionar a los inversores con sus resultados.
En otros mercados, el oro exhibía su condición de valor refugio en momentos de turbulencias financieras y subía a 1.247,1 dólares la onza, la rentabilidad de la deuda pública caía al 1,657% y el dólar perdía ante el euro, que se cambiaba a 1,1326 dólares.