La compra del Banco Popular implica que Banco Santander haya resucitado su exposición a dos de las mayores empresas reestructuradas en España en los últimos años, Abengoa e Isolux Corsán. En los últimos meses, la entidad cántabra había limitado su posición en el capital de ambas compañías, en cuyos rescates participó activamente, pero ahora, con la adquisición del Popular vuelve a irrumpir en su accionariado.
El caso más relevantes es el de Abengoa, en la que Santander se erige de nuevo en el primer accionista, condición que hasta ahora ostentaba el Popular. La entidad rescatada acapara el 4,576% del capital de la ingeniería sevillana y el banco cántabro, según consta en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) controla el 2,414%, por lo que la suma de ambos paquetes arrojaría una participación del 6,99%.
Las acciones de Abengoa en poder de Popular y Santander proceden del canje de la deuda que el grupo que preside Gonzalo Urquijo acometió a finales de marzo. El banco rojo, de hecho, recibió el mayor porcentaje de entre los fondos y entidades que participaron en la inyección de nueva liquidez, del 9,694%. Durante el mes de abril, sin embargo, vendió en dos veces el 7,2%, hasta situar su participación en el 2,4%.
Como el Santander, el resto de bancos y fondos que habían entrado en el capital de Abengoa tras la reestructuración se lanzaron a vender el grueso de sus participaciones. Banco Sabadell, Crédit Agricole, Bankia, Arvo, Caixabank, D. E. Shaw...; todos, menos el Popular, que conservó el 4,5% recibido.
Venta esperada
La decisión de vender buscaba situar su exposición en la ingeniería andaluza por debajo del 5%, que es el umbral a partir del que se les podría considerar más accionistas que acreedores y, en consecuencia, ocuparían el último lugar a la hora de cobrar su deuda en el caso de que Abengoa quebrara. Popular, por tanto, estaba protegido al tener un paquete inferior al límite citado.
A tenor de la estrategia del Santander en Abengoa, cabe esperar que el banco cántabro reduzca su posición próximamente, al menos hasta bajar del 5%. A los precios actuales, el 6,99% de Abengoa está valorado en menos de 20 millones de euros.
La adquisición del Popular también ha devuelto al Santander al capital de Isolux, del que salió hace tres meses al considerar que el grupo de construcción no era viable. La entidad que preside Ana Botín, junto con Caixabank y Bankia, lideró la inyección de 200 millones en la compañía el año pasado, pero en marzo se negó a aportar nuevos fondos y decidió vender el grueso de su deuda y su participación, que superaba el 9%. La posición del Popular en el capital de Isolux, en todo caso, es limitada.