La llegada del verano aumenta la población en las localidades costeras españolas. El sol y playa es uno de los reclamos de nuestro país, de hecho, son 615 las playas nacionales que cuentan con bandera azul, distintivo que certifica su calidad basado en información y educación ambiental, calidad del agua, gestión ambiental y seguridad y servicios. Son muchos los ciudadanos que durante los próximos meses se desplazan de vacaciones a destinos costeros, donde el mercado inmobiliario tiene una gran importancia. Algunos propietarios deciden hacer de su vivienda en la costa una segunda residencia, o, además de disfrutarla, la destinan ciertas épocas al alquiler para obtener una rentabilidad.
Según un informe elaborado por pisos.com sobre el precio de la vivienda en la costa, en 2021, deben pasar 32 años para que el propietario amortice la compra de su vivienda en la costa española, de media, en el supuesto de que se disfrutara del piso dos semanas al año y se alquilara a un tercero ocho semanas más. "Obviamente si uno compra vivienda en la costa y lo que hace es alquilarla y no disfrutarla se tarda menos en amortizar", puntualiza Ferran Font, director de Estudios de pisos.com. Esta cifra permanece invariable desde los dos años previos. Los precios del mercado inmobiliario de costa, aunque han aumentado, también muestran estabilidad.
De media, según el portal inmobiliario, una vivienda tipo en venta en las playas españolas cuesta 237.982 euros, un 0,91% más que en 2020, cuando el precio medio fue de 235.829 euros. "El mercado de costa funciona, no al margen, pero sí con sus propias reglas. Vemos como la evolución es muy continuista de lo que nos habíamos ido encontrando durante los últimos años. Al final tiene sentido que no haya grandes altibajos, ya que durante el pasado año hemos estado doce meses con este mercado bastante parado", señala Font, debido a las restricciones de movilidad y la imposibilidad de los desplazamientos internacionales.
Por su parte, en cuanto al alquiler, se ha producido un repunte interanual del 2,86%, pasando de una renta media de 730 euros semanales a 751 euros en 2021 (la subida experimentada el año pasado alcanzó el 2,29%). Así, la rentabilidad por alquilar la vivienda ha pasado del 2,48% el año pasado, hasta el 2,52% en 2021 -el cálculo de la rentabilidad y los años de amortización se realiza con cifras brutas, sin tener en cuenta aspectos como posibles revalorizaciones, datos de mantenimiento o impuestos-.
¿Dónde se tarda más?
Al norte del país, a orillas del Mar Cantábrico, se extienden los más de 170 kilómetros de la Costa Vasca. Se trata de la zona donde más tiempo se tarda en amortizar una vivienda, concretamente 50 años, a pesar de que, desde 2016 se ha reducido en 14 años, ya que entonces debían pasar 64 años para que el propietario la amortizase. Font, aunque matiza que cada mercado local cuenta con una realidad diferente, justifica esta reducción en que "al final lo que tenemos en la costa vasca es que la evolución del precio de compraventa ha sido más moderada que la evolución del alquiler. Con eso, obviamente, consigues la amortización en menos años".
En la Costa Vasca es donde más tiempo se tarda en amortizar una vivienda del litoral español, 50 años
De hecho, en esta zona el precio medio de compra de una vivienda, aunque se mantiene como el segundo más caro, ha caído un 5,09% respecto a 2020, hasta los 432.618 euros, mientras que la variación de la renta de alquiler se ha incrementado un 1,42% frente al año anterior hasta los 857 euros semanales. Aun así, se trata de la zona donde menos se gana con el alquiler, ya que la rentabilidad se sitúa en el 1,58%.
Le sigue la Costa del Garraf, cuya rentabilidad obtenida por el alquiler se sitúa en el 1,89% y el tiempo para amortizar la compra de una vivienda asciende a 42 años. Los 25 km que empiezan en Castelldefels (Barcelona) y terminan en la localidad tarraconense de Cunit albergan la zona con los pisos medios más caros en venta en el litoral español, con un precio medio de 483.035 euros, un 0,88% por encima respecto a la cifra del año pasado. En este sentido, director de estudios de pisos.com, aclara que "la Costa del Garraf no es solo turístico, sino que existe residencial mezclado, ya que está muy cerca de Barcelona y eso condiciona porque en algunos casos no es segunda residencia, sino primera".
El alquiler, por su parte, también es uno de los más elevados, al superar, de media los 1.000 euros semanales. Tan solo le superan la Costa Brava, con una renta semanal de 1.246 euros y Baleares, con el alquiler más elevado de los destinos costeros en 1.705 euros semanales. El archipiélago balear es el litoral que más beneficio reporta a los propietarios, con una rentabilidad por el alquiler del 3,89%. En dicha zona los años de amortización son 21, el periodo más corto -el precio medio de la compra es de 350.555 euros-.
La costa más barata
Los pisos más económicos se localizan en la Costa de Almería (116.072 euros). Le siguen la Costa Cálida (146.523 euros) y Rías Altas (150.709 euros). Atendiendo a las variaciones interanuales, entre las mayores bajadas, además de la Costa Vasca (-5,09%) están la Costa Brava (-3,32%) y Costa Dorada (-2,66%), mientras que las zonas donde más creció el precio de compra de vivienda son Costa Verde (7,59%), Costa del Sol (6,45%) y Costa de la Luz (6,29%).
Los pisos más económicos se localizan en la Costa de Almería, tanto en compra como en alquiler
La opción más barata en cuanto al alquiler, al igual que en 2020, vuelve a ser el litoral de Almería, cuyo precio medio se sitúa en 436 euros semanales, a pesar de experimentar una subida del 2,6% respecto al año pasado. "El precio de la Costa de Almería es más económico y responde al hecho de que existe menos demanda que en otros mercados que están más concurridos", señala Font. Las Rías Baixas (465 euros/semana, siendo la que más ha bajado su precio un 1,06%) y Rías Altas (480 euros/semana) también están entre las más asequibles para el alquiler.
