
Merlin ha cerrado el primer semestre del año con un beneficio neto contable de 512,9 millones de euros, lo que supone un incremento del 286% frente al mismo periodo del año pasado.
Este buen resultado de la socimi se basa en la revalorización de su cartera de activos y en un incremento de los ingresos del 8,5%, que alcanzaron los 275,3 millones de euros.
De estos, 264 millones corresponden a rentas brutas, que crecen un 3,4% y reflejan una ocupación de los activos del 95,4%.
El Ebitda de la socimi alcanzó en junio los 205,3 millones, lo que supone un incremento del 9% comparado con el mismo periodo de 2024. Además la socimi ha registrado un beneficio operativo de 166,6 millones, un 248% más.
El valor bruto de activos (GAV) se sitúa en 12.120 millones, con un incremento del 3,2% en valoraciones, gracias al valor generado por los centros de datos (que crecen un 38,2% frente al cierre del pasado año).
El valor neto de los activos (EPRA NTA) se sitúa en 8.476 millones de euros (15,04 euros por acción), con un aumento del 5,0% respecto a diciembre 2024.
Por otro lado, el nivel de endeudamiento (LTV) de la compañía que capitanea Ismael Clemente es del 28,6%, con una posición de liquidez de 1.649 millones y vencimiento medio de la deuda de 4,4 años. "No existen más repagos de deuda hasta noviembre de 2026 y el 100% de la deuda es a tipo fijo", apunta la compañía.
En oficinas la compañía continúa experimentando un incremento en las rentas comparables del 3,9% con una ocupación que ha alcanzado récord histórico con un 94,2% y Madrid por primera vez por encima de la media.
La cartera logística ha logrado incrementar las rentas un 2,2% con la cartera prácticamente a plena ocupación (96,2%), mientras que los centros comerciales se han apuntado un aumento de rentas del 3,2%.
En data centers la fase I, que comprende 66.389 m2 con capacidad para 64 MW IT distribuidos en tres edificios, está construida y operativa con el 70% alquilado, a la espera de recibir la totalidad de la potencia en Madrid.
Por otro lado, el beneficio operativo (FFO) esperado para 2025 es ligeramente superior al indicado a principios del ejercicio, previendo alcanzar los 0,56 euros por acción, por lo que se recomendaría al Consejo de Administración una mejora en el dividendo por acción hasta 0,42 euros.