Barcelona
El Consorci de la Zona Franca de Barcelona presentó este jueves su plan estratégico para el periodo 2025-2029, marcado esencialmente por dos iniciativas: la ampliación del complejo de oficinas industriales DFactory y la adquisición del edificio de Correos en la Via Laietana. La entidad tiene músculo inversor al contar con un 90% de ocupación en el polígono que gestiona y aspira así a crecer en el campo de la industria 4.0.
El delegado especial del Consorci, Pere Navarro, y la directora general, Blanca Sorigué, explicaron los hitos principales de la nueva estrategia. La primera fase de la ampliación del DFactory ya se ha licitado y consistirá en 30.000 metros cuadrados nuevos de oficinas colindantes al inmueble actual.
El DFactory actual ocupa 17.000 metros cuadrados, por lo que triplicará su capacidad con los dos nuevos inmuebles. La inversión acometida para esta primera ampliación rondará los 70 millones de euros –a la espera de terminar la licitación-, cifró el dirigente catalán.
Más allá del nuevo edificio, el Consorci no desfallece en sus planes de adquirir el edificio de Correos en la Via Laietana de Barcelona para crear un centro de formación y una aceleradora de start ups. El problema son las tasaciones que ambas entidades tienen del inmueble y de las que, por ley, no pueden salirse. El Consorci valora el bloque en 20 millones y Correos lo hace en 60 millones.
Por ello, ya trabajan de la mano del Ministerio de Hacienda para ver como desbloquear la situación. "El alcalde Collboni se ha tomado el proyecto como un asunto personal", dijo, esperanzado, Navarro.
El plan estratégico 2025-2029 también contempla nuevas adquisiciones de activos, como la acometida en verano con la operación de la Torre Tarragona de Barcelona, que se compró a Blackstone por 93 millones. En el sentido contrario, se desinvertirá en algunos centros de oficinas, como el Creatic y el Mediatic, que se transferirán al Ayuntamiento de Barcelona.
En el polígono de la Zona Franca, el organismo lleva a cabo un estudio para remodelar y tratar de ganar capacidad con la posibilidad –como hará Goodman en la antigua fábrica de Nissan- de hacer logística en altura y no solamente en plantas bajas. También se buscará cubrir el recinto de placas solares con las que alimentar, no solamente a las empresas de la ubicación, sino también a empresas vecinas.